Menos accidentes viales y más “Padres en la ruta”
Son padres y madres. Algunos, perdieron a sus hijos en accidentes viales. Otros, quieren evitar semejante dolor. Se autodenominan "Padres en la Ruta", y literalmente, están siempre en el camino, para prevenir y concientizar. Han logrado reducir sensiblemente el número de muertes. Su labor ha sido reconocida por la Organización Panamericana de la Salud.
Por Verónica TollerComenzaron 23 padres en 1997. Hoy, son más de diez mil en todo el país. Los impulsa la ansiedad, el temor de que el próximo sea su hijo, y la solidaridad: muchos ya perdieron a los suyos y quieren evitarle a otros padres el mismo dolor."Padres en la Ruta es una agrupación de participación ciudadana, abierta y horizontal. Somos padres autoconvocados para ocuparnos de la prevención de los siniestros viales, mediante el esfuerzo fraterno y solidario -nos respondió Isabel Grillo, jueza chaqueña y fundadora de la agrupación en su provincia-. Trabajamos por el cambio de conductas, individuales y colectivas, tanto de la sociedad como de las autoridades públicas. Queremos que la Seguridad Vial, como parte de la seguridad en general, constituya una verdadera política de Estado, en el verdadero sentido de la expresión".En Chaco, el flagelo de la inseguridad vial, muchas veces vinculado al alcohol, fue avanzando como en el resto del país. Hasta que hace cuatro años, en agosto de 2005, murió "mi hijo Nicolás, de 19 años, que circulaba como acompañante en un vehículo conducido por un joven alcoholizado de 23 años de edad", contó Isabel. Fue la última víctima de la Avenida Sarmiento, uno de los accesos a la ciudad de Resistencia, en las madrugadas de los fines de semana. Porque a raíz de esa muerte surgió "Padres en la Ruta - Chaco", siguiendo el modelo de la organización nacida en General Deheza, Córdoba, hace ya doce años (ver www.padresenlaruta.org.ar). Allí, luego de un accidente vial que cobró la vida de cinco jóvenes, el periodista Raúl Malatini convocó desde su programa de TV a todos aquéllos que estuvieran como él preocupados por estos hechos y quisieran acompañarlo en la adopción de medidas preventivas."En Chaco nos pasó como en Córdoba. Éramos muchos los que cada fin de semana, desconcertados, impotentes y aterrorizados escuchábamos la sirena de una ambulancia y nos encontrábamos con que las víctimas, fatales o no, eran generalmente jóvenes -siguió contándonos esta magistrada que hoy, trabaja en la prevención de accidentes junto a otros padres cada madrugada de fin de semana, aunque Nicolás ya no esté-. Víctimas de la imprudencia, del alcohol, de la falta de controles eficientes que garanticen el cumplimiento de las leyes por parte de las autoridades públicas y de falta de conciencia desde la ciudadanía".La agrupación cuenta con 117 integrantes, no tiene autoridades, sede social ni una organización de tipo institucional. Realizan una reunión cada último martes de mes. Hay libertad de temas. Los encuentros tienen un fuerte tenor autocrítico, de balance y organización a futuro. Diariamente, se comunican por dos correos: [email protected] y [email protected] actividades de concientización, visitas a las instituciones educativas y medios de prensa. También han acudido a hacer planteos y ofrecer ayuda ante autoridades públicas provinciales y municipales. Desde 2005 integran el Consejo de Seguridad Vial de la Provincia del Chaco invitados por el Ministerio de Gobierno, consejo "que lamentablemente no se reúne ni funciona pese a nuestros permanente pedidos", dice nuestra entrevistada.Pero fundamentalmente, padres y madres apostados junto a patrullas de tránsito o policía, realizan controles de alcoholemia durante las noches y madrugadas de fines de semana o fiestas. Si el control da negativo, les regalan golosinas. Si da positivo, los invitan a esperar un rato y les sirven café. Están organizados en grupos liderados por un padre coordinador responsable de la asistencia y de las funciones que allí realizan. Al día siguiente, elaboran un informe con los datos relevantes y las sugerencias pertinentes.¿Ilusos? ¿Cándidos? Veamos: en Córdoba, los accidentes de tránsito causados por el alcohol bajaron en un 97%. En Chaco, los "padres" lograron reducir a cero el número de siniestros viales y de víctimas en la Avenida Sarmiento los fines de semana. Generó cambios de conducta importantes desde la ciudadanía y son los jóvenes los que más se han sumado a las propuestas. Por ejemplo, cuando han consumido alcohol no manejan y llaman un taxi o remisse. También se han puesto de acuerdo: el que va a conducir el vehículo en el grupo no consume alcohol esa noche, bajo el lema "Si conducís, no tomes; si tomás, no conduzcas".También lograron mayor apertura de las autoridades hacia la agrupación. "Nos reconocen, nos convocan, nos felicitan y agradecen, lo cual nos estimula en nuestra función de control ciudadano. Sin embargo, sigue ocurriendo algo grave: no coordinan decisiones, no las mantienen a través del tiempo pese a nuestra insistencia. Lamentablemente, el consumo de alcohol y de estupefacientes u otras sustancias no ha reducido, muy por el contrario, y es éste nuestro mayor desafío", lamenta Isabel.En definitiva, reflexiona, "formamos parte de una cultura vinculada a un alto grado de transgresión al sistema normativo en todos los ámbitos y específicamente, en seguridad vial".
Entre Ríos con alto número de accidentes viales
Fueron 219 en 2006. Luego, 227 muertos y 2300 lesionados en 1700 accidentes de tránsito en 2007 en la provincia, según la Dirección de Planeamiento y la Dirección de Prevención y Seguridad Vial de la policía entrerriana. Estas cifras difieren de las que proporciona la asociación civil Luchemos por la Vida: habla de 341 víctimas fatales en 2007 y 337 en 2008. En el país, hubo más de 8205 personas fallecidas el año pasado, según la misma asociación. 683 por mes. 22 por día. En 2007 habían sido 8.104 en total."Los accidentes de tránsito son la novena causa de muerte en el mundo y acá, la tercera", dijo el coordinador de Luchemos por la Vida, Alexis DellOlio, en declaraciones a Noticias Argentinas. "Tenemos un Cromagnon cada ocho o nueve días", agregó.A su vez, entre 120 mil y 140 mil personas resultaron heridas en 2008 por esta misma causa, con diferente gravedad de consecuencias.Entre Ríos está quinta en las estadísticas nacionales de accidentes. Van a la cabeza Paraná, Concordia y Gualeguaychú, en ese orden.Muchas veces, estos padres han dicho a los conductores "estás alcoholizado, mejor no manejes". Y los conductores lo reciben de distintas formas. Algunos aceptan. Curiosamente, son los mayores de 30 los que menos se allanan.En Argentina se ha fijado el objetivo de disminuir en un 50% los accidentes de tránsito para 2015, usando como herramienta la Ley 26.363, que creó la Agencia Nacional de Seguridad Vial. Esta agencia intenta crear una política nacional coordinada."Convocatoria. Hora: 5 de la madrugada. Si no llega nadie fijarse dónde están los agentes municipales y policiales, a lo largo de la Avenida Sarmiento. Las autoridades municipales son las que fijan el lugar exacto, de acuerdo a los boliches abiertos y eventos programados para cada fecha. Retirar la noche anterior los chalecos del motomandados. No olvidar devolverlos al terminar el operativo por la mañana. Llevar carpeta y planillas, calcos y folletos. Café y chupetines o caramelos para hacer más ameno el control y endulzar los espíritus". (Correo electrónico de Padres en la Ruta, Chaco)
Por Verónica TollerComenzaron 23 padres en 1997. Hoy, son más de diez mil en todo el país. Los impulsa la ansiedad, el temor de que el próximo sea su hijo, y la solidaridad: muchos ya perdieron a los suyos y quieren evitarle a otros padres el mismo dolor."Padres en la Ruta es una agrupación de participación ciudadana, abierta y horizontal. Somos padres autoconvocados para ocuparnos de la prevención de los siniestros viales, mediante el esfuerzo fraterno y solidario -nos respondió Isabel Grillo, jueza chaqueña y fundadora de la agrupación en su provincia-. Trabajamos por el cambio de conductas, individuales y colectivas, tanto de la sociedad como de las autoridades públicas. Queremos que la Seguridad Vial, como parte de la seguridad en general, constituya una verdadera política de Estado, en el verdadero sentido de la expresión".En Chaco, el flagelo de la inseguridad vial, muchas veces vinculado al alcohol, fue avanzando como en el resto del país. Hasta que hace cuatro años, en agosto de 2005, murió "mi hijo Nicolás, de 19 años, que circulaba como acompañante en un vehículo conducido por un joven alcoholizado de 23 años de edad", contó Isabel. Fue la última víctima de la Avenida Sarmiento, uno de los accesos a la ciudad de Resistencia, en las madrugadas de los fines de semana. Porque a raíz de esa muerte surgió "Padres en la Ruta - Chaco", siguiendo el modelo de la organización nacida en General Deheza, Córdoba, hace ya doce años (ver www.padresenlaruta.org.ar). Allí, luego de un accidente vial que cobró la vida de cinco jóvenes, el periodista Raúl Malatini convocó desde su programa de TV a todos aquéllos que estuvieran como él preocupados por estos hechos y quisieran acompañarlo en la adopción de medidas preventivas."En Chaco nos pasó como en Córdoba. Éramos muchos los que cada fin de semana, desconcertados, impotentes y aterrorizados escuchábamos la sirena de una ambulancia y nos encontrábamos con que las víctimas, fatales o no, eran generalmente jóvenes -siguió contándonos esta magistrada que hoy, trabaja en la prevención de accidentes junto a otros padres cada madrugada de fin de semana, aunque Nicolás ya no esté-. Víctimas de la imprudencia, del alcohol, de la falta de controles eficientes que garanticen el cumplimiento de las leyes por parte de las autoridades públicas y de falta de conciencia desde la ciudadanía".La agrupación cuenta con 117 integrantes, no tiene autoridades, sede social ni una organización de tipo institucional. Realizan una reunión cada último martes de mes. Hay libertad de temas. Los encuentros tienen un fuerte tenor autocrítico, de balance y organización a futuro. Diariamente, se comunican por dos correos: [email protected] y [email protected] actividades de concientización, visitas a las instituciones educativas y medios de prensa. También han acudido a hacer planteos y ofrecer ayuda ante autoridades públicas provinciales y municipales. Desde 2005 integran el Consejo de Seguridad Vial de la Provincia del Chaco invitados por el Ministerio de Gobierno, consejo "que lamentablemente no se reúne ni funciona pese a nuestros permanente pedidos", dice nuestra entrevistada.Pero fundamentalmente, padres y madres apostados junto a patrullas de tránsito o policía, realizan controles de alcoholemia durante las noches y madrugadas de fines de semana o fiestas. Si el control da negativo, les regalan golosinas. Si da positivo, los invitan a esperar un rato y les sirven café. Están organizados en grupos liderados por un padre coordinador responsable de la asistencia y de las funciones que allí realizan. Al día siguiente, elaboran un informe con los datos relevantes y las sugerencias pertinentes.¿Ilusos? ¿Cándidos? Veamos: en Córdoba, los accidentes de tránsito causados por el alcohol bajaron en un 97%. En Chaco, los "padres" lograron reducir a cero el número de siniestros viales y de víctimas en la Avenida Sarmiento los fines de semana. Generó cambios de conducta importantes desde la ciudadanía y son los jóvenes los que más se han sumado a las propuestas. Por ejemplo, cuando han consumido alcohol no manejan y llaman un taxi o remisse. También se han puesto de acuerdo: el que va a conducir el vehículo en el grupo no consume alcohol esa noche, bajo el lema "Si conducís, no tomes; si tomás, no conduzcas".También lograron mayor apertura de las autoridades hacia la agrupación. "Nos reconocen, nos convocan, nos felicitan y agradecen, lo cual nos estimula en nuestra función de control ciudadano. Sin embargo, sigue ocurriendo algo grave: no coordinan decisiones, no las mantienen a través del tiempo pese a nuestra insistencia. Lamentablemente, el consumo de alcohol y de estupefacientes u otras sustancias no ha reducido, muy por el contrario, y es éste nuestro mayor desafío", lamenta Isabel.En definitiva, reflexiona, "formamos parte de una cultura vinculada a un alto grado de transgresión al sistema normativo en todos los ámbitos y específicamente, en seguridad vial".
Entre Ríos con alto número de accidentes viales
Fueron 219 en 2006. Luego, 227 muertos y 2300 lesionados en 1700 accidentes de tránsito en 2007 en la provincia, según la Dirección de Planeamiento y la Dirección de Prevención y Seguridad Vial de la policía entrerriana. Estas cifras difieren de las que proporciona la asociación civil Luchemos por la Vida: habla de 341 víctimas fatales en 2007 y 337 en 2008. En el país, hubo más de 8205 personas fallecidas el año pasado, según la misma asociación. 683 por mes. 22 por día. En 2007 habían sido 8.104 en total."Los accidentes de tránsito son la novena causa de muerte en el mundo y acá, la tercera", dijo el coordinador de Luchemos por la Vida, Alexis DellOlio, en declaraciones a Noticias Argentinas. "Tenemos un Cromagnon cada ocho o nueve días", agregó.A su vez, entre 120 mil y 140 mil personas resultaron heridas en 2008 por esta misma causa, con diferente gravedad de consecuencias.Entre Ríos está quinta en las estadísticas nacionales de accidentes. Van a la cabeza Paraná, Concordia y Gualeguaychú, en ese orden.Muchas veces, estos padres han dicho a los conductores "estás alcoholizado, mejor no manejes". Y los conductores lo reciben de distintas formas. Algunos aceptan. Curiosamente, son los mayores de 30 los que menos se allanan.En Argentina se ha fijado el objetivo de disminuir en un 50% los accidentes de tránsito para 2015, usando como herramienta la Ley 26.363, que creó la Agencia Nacional de Seguridad Vial. Esta agencia intenta crear una política nacional coordinada."Convocatoria. Hora: 5 de la madrugada. Si no llega nadie fijarse dónde están los agentes municipales y policiales, a lo largo de la Avenida Sarmiento. Las autoridades municipales son las que fijan el lugar exacto, de acuerdo a los boliches abiertos y eventos programados para cada fecha. Retirar la noche anterior los chalecos del motomandados. No olvidar devolverlos al terminar el operativo por la mañana. Llevar carpeta y planillas, calcos y folletos. Café y chupetines o caramelos para hacer más ameno el control y endulzar los espíritus". (Correo electrónico de Padres en la Ruta, Chaco)
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