Asambleístas avanzarán hoy sobre acción en Buquebús

Lo anunciamos el sábado pasado: hoy, a las 5 de la tarde, en el local de la Asamblea del Pueblo de San Telmo en Buenos Aires, se reunirá la Asamblea Ciudadana de Gualeguaychú con unas 14 organizaciones sociales, ambientales, de derechos humanos y partidos políticos de izquierda.o

Por Verónica Toller

Juntos, coordinarán la siguiente acción en contra de Botnia y la instalación de pasteras en la cuenca del Río Uruguay. Esta acción se verificará probablemente el día 30 de enero con una marcha a Buquebús y a la Embajada de Finlandia en Buenos Aires.

Así nos lo había adelantado durante el corte de Colón el referente de San Telmo Raúl Saubelard, y así lo confirmó ayer en un comunicado de prensa la Asamblea de nuestra ciudad.

La evaluación de la asamblea y la evaluación de los medios

No fue el único comunicado. Hubo otro, sobre el resultado de la acción en Colón el fin de semana pasado. “Los objetivos se están cumpliendo, se concientiza a la sociedad y se defienden los fundamentos de la lucha”, dice este segundo comunicado.

En otras palabras, los asambleístas consideran que la acción fue un éxito. “Se concientiza”, afirman. Desde un punto de vista, tal vez. “Tenemos a todos los medios de comunicación presentes y el tema vuelve al tapete”, reflexionaron varios de los presentes en Colón. Pero atención: tener a los medios presentes o que pregunten si se va a cortar o no el puente Artigas no es sinónimo de que el conflicto contra las pasteras vuelva a ser del interés del público.

No. No es la forma en que funciona la información.

Los medios hacen foco en una cuestión noticiable en medio del verano (corte de pasos fronterizos, en este caso) y van a cubrir lo que, creen, puede darles mayor rating o lectores u oyentes. Nada más. Muy poco o nada se dijo en la mayoría de los medios nacionales acerca del por qué de la protesta, de los fundamentos con que los asambleístas luchan contra la posible contaminación. Por el contrario, el gobierno embistió de nuevo y el titular fue: “INTI, Botnia no contamina”.

Y junto a ello, las críticas por los inconvenientes, daños, demoras, etc, que el bloqueo de la frontera traería, de la mano de los “fanáticos” asambleístas.

Entonces, la afirmación de “estamos contentos, el objetivo se cumplió, mirá cuántas cámaras hay” parece guardar una distancia considerable con lo que los medios efectivamente vuelcan al respecto.

Una de las notas de opinión de La Nación, ayer, expresa la forma en que los grandes medios y sus respectivos públicos ven estas acciones:

“Hoy, los cortes no despiertan ningún atractivo. No tienen base legal, afectan otros derechos, como la libertad de tránsito o de libre empresa, y se sostienen porque ninguna autoridad se atreve a hacer nada al respecto. Los recientes informes, preparados por una organización independiente, que afirman que Botnia no contamina, acaban de ser refrendados por la opinión del presidente de un organismo oficial tan prestigioso como el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI). El ingeniero Enrique Martínez dijo: "Según nuestros estudios, hoy Botnia no está contaminando". Por todo esto, es necesario poner fin a este conflicto cuanto antes. Restablecer el derecho de todos de circular libremente y evitar que vuelva a suceder un hecho similar en el futuro”.

“Lo que nos enseñó Gualeguaychú”

De todos modos, sabemos que las cosas nunca son totalmente negras o totalmente blancas. El mismo editorial que sostiene el párrafo anterior opina, sin embargo, que “lo que nos enseñó Gualeguaychú” o el conflicto pastero es que los procesos de evaluación de impacto ambiental son muy limitados, “no se realiza un análisis profundo de las alternativas de desarrollo viables; existe un precario sistema de información y participación del público; se cuenta con una escasa capacidad de monitoreo de las actividades y se carece de un procedimiento para evaluar los eventuales daños que puedan causar los emprendimientos más allá de las fronteras del territorio donde se proyectan”.

Más adelante, la nota hace memoria: “En 2000, el Frente Amplio, hoy a cargo del gobierno en Uruguay, sostenía que las pasteras eran "poco trabajo para hoy y mucha destrucción ambiental para mañana". Cuando Tabaré Vázquez ganó las elecciones presidenciales, anunció que las plantas se construirían "tal como estaba planeado (…) El entonces presidente Kirchner se sumaría luego al sentir de los "piqueteros ambientalistas" llevando además a casi todos los gobernadores obedientes (y a varios ómnibus repletos de personas) a un acto en Gualeguaychú para fortalecer el reclamo, besar una leyenda contra Botnia y afirmar que la lucha era "una causa nacional". Ahora asegura que nunca apoyó los cortes. (…) Para evitar incidentes similares se deberá contar con un sistema que establezca un procedimiento diferente, que contemple los posibles impactos transfronterizos y que involucre a todas las comunidades potencialmente afectadas, aunque se encuentren más allá de las fronteras”.

Vega y los “Robespierre”

El diputado nacional del ARI Juan Carlos Vega y ex abogado del gobierno entrerriano en la causa que abrieron Busti y Guastavino en el Juzgado Federal de Concepción del Uruguay contra la pastera finlandesa por “tentativa de contaminación”, volvió a hablar del tema. Esta vez, con medios de prensa uruguayos. Dijo que la metodología de corte de ruta está “agotada” y que "la defensa del medio ambiente se da patadas con la toma de los puentes". Además, el legislador criticó la "notoria ineficiencia de ambas cancillerías para solucionar un conflicto ridículo". Calificó a los asambleístas de Gualeguaychú de "Robespierre” que “no pasan de ser 12 ó 14".

También volvió a ir contra los cortes el intendente de Colón, Hugo Marsó. Dijo que el corte de Gualeguaychú "caerá por su propio peso". "La protesta tuvo muy poca repercusión –sostuvo, en referencia a la acción del fin de semana-. Tenemos un diario local que dijo que hubo 12 personas de Colón. Al resto, los tuvieron que traer de Buenos Aires para hacer número, que también fue muy chico".

Colón: los asambleístas no descarta volver a la ruta

En tanto, Carlos Serrati, asambleísta de Colón, opinó que “hubiésemos querido que sea más numerosa, pero en cuanto a la calidad de la protesta, creo que surtió su efecto”. Afirmó que “no se descarta la posibilidad de volver a salir a los pasos fronterizos de Colón o Concordia”.

Evaluó que “jugó en contra la presencia de la gente y toda la actitud del tipo disuasoria tanto del gobierno nacional, como del provincial, que hizo que la gente participe poco”. De todos modos, “se puso nuevamente en consideración nacional que a orillas del río Uruguay existe un problema que está sin resolver”, agregó.

Esta semana, los asambleístas de Colón junto a un grupo de comerciantes que apoyan los postulados antipasteras pero no los cortes, organizarán una volanteada por el centro de la ciudad para concientizar a los 22 mil turistas que en estos momentos veranean en esa ciudad.

Resultado poco exitoso

Juan Veronesi declaró ayer a Radio Cero: “el resultado de la acción en Colón no fue tan exitoso porque no logramos el objetivo propuesto de cortar la ruta efectivamente”. Y adelantó que “trataremos de dialogar con el gobernador sobre las cosas que nos unen, ya que ha dicho que son más éstas que las que lo separan de la Asamblea”.