MEDIO AMBIENTE
Un grupo ambientalista uruguayo afirma que UPM oculta las consecuencias del último derrame de ácido sulfúrico
“Es imposible que no haya habido una afectación ambiental”, afirman desde la organización Movus sobre el incidente ocurrido hace dos semanas atrás en la planta ubicada en Fray Bentos, frente a Gualeguaychú.
Un nuevo derrame de productos químicos en UPM (ex Botnia) en Fray Bentos motivó al Movimiento por un Uruguay Sustentable (Movus) a advertir por la falta de transparencia por parte de la empresa, que ha optado por no brindar información al respecto.
El vocero de la organización, Raúl Viñas, adelantó que es muy probable que la descarga haya sido mayor a la declarada. Además, cuestionó el monitoreo de las instalaciones y la falta de control sobre los productos químicos en tránsito, y aseguró que las autoridades han sido cómplices al ocultar incidentes anteriores similares.
“El principal desafío es que no hay información real de lo sucedido. Lamentablemente, desde el punto de vista simbólico es un hecho importante, como fue la presencia del ministro de Ambiente, el subsecretario y el director de la Dinacea (Dirección Nacional de Calidad y Evaluación Ambiental) en el lugar a 24 horas del derrame, técnica y políticamente no agrega nada o termina siendo contraproducente”, remarcó Viñas.
“Desde el Movus vemos que al momento no tenemos ningún informe del Ministerio sobre el derrame y que la comunicación de la empresa no se reflejó en la web de UPM Uruguay hasta al menos 48 horas después del derrame. Tenemos información de personas que participaron en la limpieza y que nos dicen que el derrame sucedió a partir de la rotura de un caño y que la bomba del barco siguió trabajando, o sea, arrojando ácido sulfúrico, por un período superior a 10 minutos. Así, el volumen derramado sería mucho mayor a lo declarado por la empresa”, advirtieron los ambientalistas.
“Antes de que el ministro concurriera al lugar, le aconsejamos que pidiera o exigiera las grabaciones de video de las cámaras que UPM tiene en el muelle donde supuestamente sucedió el derrame. También le pedimos al ministro que solicitara el manifiesto de carga del barco. El barco atracó en el puerto de UPM el lunes a las 10 de la mañana, comenzando con las descargas de diferentes productos y, para las 17 horas, cuando estaba realizando la de ácido sulfúrico, se produjo el derrame. Vemos con preocupación que, sin un informe del Ministerio, el ministro se apresuró a decir lo que la empresa le dijo: que el derrame había sido totalmente controlado, que habían sido 1000 litros y que se habían recuperado 500. Agregó que lo preocupaba un ‘goteo’ que se habría producido de una válvula defectuosa. Si eso se comprobara, yo me preocuparía más por los 500 litros de los cuales no se sabe qué pasó”, afirmaron.
“Este tipo de situaciones son fuertes llamados de alerta sobre aquellas cosas que no se están haciendo correctamente. En Movus le damos importancia a que estas cosas se sepan. Ya hemos tenido experiencia del ocultamiento de situaciones similares por parte de UPM. Así, más allá de procurar la información más fidedigna, trabajamos en su divulgación y difusión para que se conozcan los hechos reales y no solamente las edulcoradas versiones que dan las empresas”, sostuvieron.
“En cuanto a ser escuchados por las autoridades, en Movus desde hace más de 15 años tenemos una relación fluida con las autoridades, especialmente las ambientales. Eso no quiere decir que sea una buena relación, ya que muchas veces operamos con puntos de vista diferentes y tenemos discusiones francas”, concluyeron.