INUNDACIÓN Y EVACUADOS
Río Gualeguaychú: por qué no creció como se esperaba
El peor de los escenarios no ocurrió, y el agua se mantuvo una altura promedio de 4,20 metros, muchísimo menos que el 4,60 pronosticado. Sin embargo, las alertas continúan dado que el regreso de una sudestada podría agravar nuevamente la situación debido a que las lluvias caídas en el centro de la provincia siguen bajando. Al mismo tiempo, en el barrio Munilla, la Dirección de Salud asiste sanitariamente y de manera preventiva a los vecinos que están en contacto con el agua estancada, contaminada por aguas cloacales y la presencia de roedores.
Matías Venditti
Esta semana, el Municipio había adelantado su preocupación por la presencia de indicadores que anticipaban que el caudal de agua del río Gualeguaychú llegaría, como mínimo, a los 4,60 metros, pudiendo llegar ser 100 las familias afectadas, principalmente aquellas que viven en el Camino de la Costa y en el barrio Munilla.
Sin embargo, para las últimas horas de la tarde del viernes el panorama se presentaba distinto a lo previsto, con una altura del río rondando los 4,20 metros. Mientras tanto, el río Uruguay se mantenía estable y con tendencia a la baja, lo cual permitió que el agua del río Gualeguaychú fluyera y desembocara sin tantos obstáculos.
¿Pero qué fue lo que pasó? Según informaron fuentes municipales, la advertencia hecha durante los últimos días tomó como precaución una diferencia de unos 40 centímetros de más, con un error de aproximadamente 20 centímetros. Sin embargo, también está el factor de que el río Uruguay tuvo un gran descenso: “Bajó estrepitosamente; pasó de los 3,80 metros a los 3,30 y 3,25 metros. Ese fue el factor determinante”, explicó el titular de Defensa Civil, Cristian Magne, a Ahora ElDía.
Lo cierto es que ahora todas las miradas están puesta en la dirección del viento, y todos cruzan los dedos para que no vuelva otra sudestada, la cual haría subir la altura del Uruguay y, por ende, del Gualeguaychú, sobre todo teniendo en cuenta que aún sigue bajando el agua de las precipitaciones acontecidas en el centro de la provincia, más específicamente en Villaguay, donde nace la cuenca de nuestro río.
Otro de los factores que actuaron a favor para que el agua no llegue a alturas preocupantes fue que, en estos momentos, el arroyo Gualeyán actúa como una especie de amortiguador: parte del agua está ingresando allí, por lo que no toda está saliendo por el río y eso alivia bastante la altura en el puerto.
En definitiva, el peor de los escenarios no ocurrió este viernes, lo cual es un alivio para todos. Sin embargo, las alertas siguen estando porque un cambio en la dirección del viento y el agua que todavía queda por correr podrían complicar la situación de un momento para el otro.
Evacuados y asistencia a los inundados
Con el alivio de que la altura del río no superó las expectativas que se tenía, tampoco hubo que evacuar a unas cien familias que iban a ser afectadas por el agua. De todas maneras, aún hay personas en el Centro de Evacuación montado en el Regimiento y también vecinos, sobre todo del barrio Munilla, afectados por el agua y en riesgo sanitario.
Consultado por la situación de los evacuados, el secretario de Desarrollo Humano de la ciudad –cartera que incluye la Dirección de Salud–, Juan Ignacio Olano, informó a Ahora ElDía que al cierre de esta edición eran 13 las personas que estaban evacuadas. Se trata de tres familias, dos que viven en el Camino de la Costa y una en el Barrio Munilla.
Sobre las medidas tomadas al respecto, Olano explicó que a través del Centro de Asistencia Primaria de Salud (CAPS) del Munilla se empezaron a repartir módulos alimentarios, medicamentos “y de toda aquella necesidad que sea necesaria y que requieran los vecinos”.
Por su parte, el Director de Salud, Pablo Alfaro, indicó que el Munilla es uno de los barrios más afectados y donde hay mayor densidad de población y en el que el agua se mantiene estacionaria.
El mayor problema ahora en esa zona es que el contacto del agua estancada con aguas cloacales y la presencia de roedores hacen de la situación un peligro para la salud de los vecinos. Dado este panorama, Alfaro señaló que se han administrado tratamientos antibióticos de forma profiláctica a la población del barrio, y que esta ha demostrado buena adherencia a los mismos.
La realidad es que el barrio Munilla es uno de los barrios donde hay mayor densidad de población, de las zonas afectadas, el agua se mantiene estacionaria.
“Actualmente la situación desde el aspecto de salud, de cierta forma está controlada. Las personas han tenido buena adherencia a los tratamientos antibióticos de forma profiláctica. Esto es parte de un protocolo de atención para las personas en inundaciones. Los roedores transmiten enfermedades y por eso se les dan antibióticos como profilaxis para que no se vayan a enfermar”, explicó Alfaro a Ahora ElDía.
“Además, se han completado eventualmente los esquemas de vacunación. La verdad es que no ha habido aplicación de vacunas prácticamente porque la mayoría de las personas tienen los calendarios de vacunación completos. El viernes lo que se hizo fue entregar los módulos de alimentos y comestibles a un total de 75 personas aproximadamente. Y el jueves también se hizo lo mismo. La verdad es que si bien el agua no está tan alta, en algunos lugares tienen agua dentro de las casas con pocos centímetros. Pero también hay muchos vecinos que tienen el agua prácticamente en la puerta de su hogar. Es en esos casos donde se produce el contacto con esa agua contaminada, que no sólo está en mal estado por las excretas de roedores y ratas, sino además que es todo agua cloacal. Todo eso conforma un caldo de cultivo”, concluyó Alfaro.
Municipio y Provincia articulan asistencia
El intendente Mauricio Davico y la ministra de Desarrollo Humano de Entre Ríos, Verónica Berisso, recorrieron el río Gualeguaychú para observar su comportamiento y coordinar la asistencia del gobierno provincial.
Durante la tarde, ambos mantuvieron un primer encuentro en el palacio municipal. Allí pudieron conversar acerca de la realidad que vive la ciudad a partir del aumento del caudal del río, el monitoreo de las zonas y familias afectadas, y las distintas líneas de acción que viene desarrollando el municipio.
En el encuentro el intendente puso en conocimiento de la ministra de Desarrollo Humano sobre cuál es la modalidad de abordaje territorial del personal municipal y mostró detalles del operativo montado a causa de la posibilidad de un aumento considerable de la altura del río Gualeguaychú, según establece la información preventiva.
En ese contexto, Davico agradeció a Berisso la colaboración por parte del gobierno provincial para poder brindar una respuesta inmediata a las familias con elementos de primera necesidad. Además la ministra se comprometió a monitorear diariamente la situación de la ciudad y puso a disposición diferentes recursos con los que cuenta el gobierno provincial para afrontar la crecida del río.
Luego de la reunión, ambos funcionarios realizaron una recorrida por el río Gualeguaychú para observar su comportamiento, profundizar el análisis de la situación en la cuenca y planificar acciones de contención a los vecinos afectados.