INTERNAS Y DIVISIONES DENTRO DEL PIAGGISMO
Reclamos, reproches y sarcasmos en el oficialismo: duro cruce de Boari con Noguera y Ghiglione
Las divisiones quedaron expuestas cuando se debatió la vuelta de la combi de traslado para pacientes oncológicos, un proyecto presentado por Noguera y Ghiglione. Pero Boari, compañero de bancada de ambas, se opuso y expuso sus argumentos para ir en contra de la iniciativa, que sólo se pudo aprobar por el apoyo de la oposición. El punto más fuerte se alcanzó cuando una de las concejalas cuestionó si era más importante comprar Parque del Sol en vez de ofrecer el servicio. Las intervenciones de Pablo Echandi, de Juntos por el Cambio, sólo agitaron más un clima espeso.
Por Amílcar Nani
Era una mañana más en el Concejo Deliberante, donde los tiempos y debates se mantenían en el canon de lo normal. Todo hasta que se comenzó a tratar el expediente Nº 7150/2022, el cual exponía el Proyecto de Ordenanza presentado por las concejalas Andrea Noguera y Sofía Ghiglione, el cual pedía la restitución del servicio de traslado de pacientes oncológicos desde nuestra ciudad a otras ciudades de la provincia sin discriminación alguna. El mismo había tenido despacho de las Comisiones Conjuntas y llegaba de esta manera al recinto.
¿De qué trata el proyecto? Que se restablezca el servicio de combis que llevaban enfermos oncológicos a realizarse rayos o quimioterapias a localidades que brinden el tratamiento que no está presente en nuestra ciudad. Este servicio funcionó durante 40 años a cargo de Municipio, y se interrumpió cuando comenzó la pandemia por cuestiones sanitarias.
“Durante muchos años hubo un servicio público, como era la combi que salía todos los días a las 5 y media de la mañana desde la plaza para llevar pacientes oncológicos a otras ciudades de la provincia, principalmente Concepción del Uruguay. Los que no tienen obra social son los que más usan el servicio. Y nos consta que muchas personas que sí tienen obras sociales tienen que recurrir a un amparo porque no se hacen cargo, y las que lo hacen no cuentan con servicios suficientes de colectivos, sobre todo teniendo en cuanta que la terminal de ómnibus (de Concepción del Uruguay) está alejado de donde reciben el tratamiento. Es un servicio humanitario e indispensable para la comunidad de Gualeguaychú. Por eso exigimos que se restablezca, independientemente si es algo de Nivel 1 (a cargo del Municipio) o Nivel 2 (a cargo de Provincia), sabiendo que este servicio es prestación que corresponde al segundo nivel”, introdujo el tema la concejal del Frente Creer Entre Ríos Andrea Noguera, una de las autoras del proyecto.
Inmediatamente tomó la palabra Sofía Ghiglione, la otra autora del proyecto y compañera de bancada en el oficialismo: “Es algo que viene a cubrir una necesidad en un momento muy difícil de la vida como lo es tener una enfermedad oncológica. Todos hemos recibido diferentes demandas que nos marcan que hay dificultades para costear el viaje. Y pasar por esos tratamientos es algo muy difícil como para depender de los servicios y los horarios de los colectivos”.
Sin embargo, las objeciones al proyecto no vinieron desde la oposición sino desde el propio oficialismo, especialmente desde la voz del concejal Juan Boari: “Quiero destacar la buena intención del proyecto, sin embargo me voy a abstener y voy a explicar el porqué. Soy personal de salud desde hace 23 años. Nuestro sistema de salud es mixto: público y privado. Y se divide en niveles: el nivel Nº1, que está a cargo del Municipio, se acompaña a los pacientes. El Nivel Nº2, de mayor complejidad, abarca a los hospitales provinciales, en todos sus tipos. Cada nivel de atención tiene una competencia y una responsabilidad. Los pacientes oncológicos corresponden al Nivel Nº2, y no es un capricho, sino que hay pacientes de diferente gravedad. Por lo tanto, un municipio no se puede hacer cargo aunque más no parezca que es un traslado”, explicó en el recinto.
“El sistema que funcionó desde 1980 tenía mucha voluntad pero era insatisfactorio por muchas razones, y cubría una necesidad donde algún otro organismo no lo estaba cubriendo. Eran pacientes sin seguros de salud. A partir de la pandemia se dejó de implementar por parte del Municipio y lo comenzó a hacer el Hospital, que lo hace según la necesidad del paciente. Pero a los que no se hace cargo son con los pacientes que tienen obra social, que es quien tiene que afrontar este servicio. Y si no lo hacen los privados (obras sociales y prepagas) no quiere decir que se tenga que hacer cargo el Municipio”, de ninguna manera”, enfatizó.
“Tenemos que buscar herramientas para que la obra social cumpla, de lo contrario todos los vecinos de Gualeguaychú estamos cubriendo lo que debería cubrir una obra social, como OSDE o Swiss Medical, que durante años han recaudado millones y que tienen la obligación de cumplir al paciente”, remarcó.
Otro de los puntos que Boari remarcó es que el Municipio no se puede hacer cargo por una cuestión de riesgo: “Este expediente no sólo que no va a resolver un problema, sino que lo va a agravar. Si de esa combi se necesita trasladar un paciente complejo, ¿qué le vamos a decir al vecino si su familiar murió o no llegó? Pareciera que esto es lo único que tenemos para hacer”, advirtió y agregó: “No se puede hacer eso. Es buena la intención, pero por una cuestión hasta legal y de competencia, adjudicarle al Municipio esta responsabilidad. ¿Y si pasa algo en la combi? Como Municipio tenemos que luchar que las obras sociales y las prepagas se hagan cargo de todo, pero no podemos hacer las cosas de esta manera”.
Fue en este momento donde los murmullos se comenzaron a sentir, al punto tal que Boari acusó a Noguera de reírse mientras él hablaba, lo que provocó que la viceintendenta Lorena Arrozogaray interrumpiera todo para llamarle la atención a la concejala: “Luego de que termine, va a tener uso de la palabra”.
Y ante este panorama de división interna en el bloque piaggista, de pronto pidió la palabra el concejal de Juntos por el Cambio Pablo Echandi, quien no dudó en ponerle un poco más de picante a la pelea de los oficialistas.
“Creo que el concejal Boari fue muy contundente en 7 u 8 negativas como para abstenerse, por lo que debería tener el coraje de votar en contra. En este caso puntual, es un servicio que se prestaba, los riesgos no los veo porque tienen que tener seguro y no es responsabilidad del municipio si justo ese día le toca que le llegue la hora. Son excusas y más excusas para no votar por un proyecto que al Ejecutivo no le gusta. Así que felicito a las concejalas (por Ghiglione y Noguera) por presentar esta iniciativa”, afirmó de manera provocativa Echandi luego de aclarar que va a acompañar el proyecto.
Fue entonces cuando tomó la palabra Ghiglione para contestarle a su compañero de bancada: “Estamos hablando de personas que necesitan un tratamiento ambulatorio, por lo tanto que se pueden trasladar. Generalmente, cuando alguien tiene una prepaga se va en su auto particular. Pero con una obra social dice que cumple con lo que demanda la ley dándole un pasaje de colectivo, lo cual implica que esa persona tenga que tener un traslado hasta el lugar del tratamiento. Y cualquiera que haya atravesado una situación con un familiar en quimioterapia, sabemos cómo salen, débiles y descompuestas. Y el proyecto dice que el Municipio debe cobrarle a las obras sociales el monto del traslado y no que las personas deban hacer un amparo para que le resuelvan la cuestión. Nosotros, como Estado, podemos facilitarle todo y después nos hacemos cargo. Vamos a facilitar el trámite, y no decimos que vamos a cubrir las obras sociales”.
Y entonces, la concejala levantó la apuesta y comenzó a dimensionar su proyecto con iniciativas propuestas por sus propios compañeros y el Ejecutivo: “Somos un gobierno peronista y tenemos que hacerles la vida más fácil a las personas. Nos hacemos cargo de muchas cosas que no nos corresponden. Si hablamos de competencias, hoy hablamos de declarar la prohibición del trigo transgénico. ¿No podemos poner una combi para llevar a nuestros vecinos y si un camión para ir al Mercado Central a buscar frutas y verduras orgánicas? ¿Tenemos una playa para que todos vayan a disfrutar del río de manera gratuita y no podemos tener una combi para nuestros vecinos? ¿No podemos solventar ese gasto? Me parece que no estamos tomando dimensión de lo que estamos hablando”.
Y la respuesta no se hizo esperar: “No puedo creer lo que dijo el concejal Echandi, que comparó cortar el pasto o ceder combustibles con un servicio de salud del segundo nivel y que debería cubrir una prepaga. Y después la concejala Ghiglione diciendo que compramos una playa y que no vamos a hacer esto. ¿Realmente no entendemos la diferencia? Jamás hablé de los gastos porque no se trata de los costos, sino del riesgo. Ellos mismos han dicho que salen debilitados, y lo que corresponde en esos casos es que tiene que ir en una ambulancia, no en una combi o un colectivo. ¿Me van a explicar a mi cómo tiene que ir un paciente tras una quimio? 25 años trabajo en esto. Lo que corresponde es una ambulancia, y a cargo de las obras sociales”, renegó Boari.
En este momento, se comenzó a escuchar la voz del opositor Echandi, y Boari no se lo dejó pasar: “¿Estoy escuchando a un futuro candidato a intendente? ¿Ni siquiera puede hacer silencio en el Concejo Deliberante?”, afirmó y obligó a una nueva intervención de la Viceintendenta.
Luego todo continuó en una discusión en espiral entre propios compañeros de bancada: que no es una ambulancia, que es una combi, que está destinada a pacientes que no tienen un estado complejo sino ambulatorios, que de qué se hacen a cargo o no como Municipio. Y entonces se comenzó a notar una división que cada vez en más clara dentro de la bancada del piaggismo, que quedó marcada en la votación final
El proyecto fue aprobado por los votos positivos de Noguera, Ghiglione y Nacho Farfán, y los del bloque de Juntos por el Cambio: Pablo Echandi, Alejandra Leissa y Juan Olano; y el resto del piaggismo se dividió de la siguiente manera: votaron en contra Juan Boari (que cambió la abstención por la negativa) y Hernán Ayala, mientras que Pablo Fernández, Selva Chesini, Ezequiel Quinteros y Susana Villamonte prefirieron abstenerse.