Peñarol fue eficaz en los penales y se quedó con la Copa de Campeones

En la noche del jueves en cancha de Unión del Suburbio, se disputó la final de la Copa de Campeones entre Peñarol y Boca Juniors. El partido fue intenso, friccionado y con un par de piernas fuertes de ambos lados que fueron merecedoras de tarjeta roja, aunque el árbitro Hugo Núñez no lo entendió así. A poco de iniciado el juego Nicolás Níssero, atacante de Boca Juniors, fusiló a Matías Giménez, respondiendo el arquero con una atajada fenomenal. En el segundo tiempo, Peñarol probó los reflejos de Martín Brighenti, respondiendo el ex Central y Cerro con una atajada magistral. Los minutos se fueron consumiendo sin que se pudiera romper la paridad. La seguridad de los arqueros, y una muy buena labor de los centrales Juan Chaparro (Boca) y Agustín Corbalán (Peñarol), imposibilitaron el grito de gol. El “1” de Peñarol agigantó su figura en los tres palos atajando los dos primeros penales de Boca. En el primero fue abajo a la izquierda, mientras que en el segundo tapó un remate cruzado. Peñarol no falló desde los doce pasos: Salva, Folmer, Benítez y Chaparro decretaron el 4 a 1 final. Después fue tiempo de festejos y la entrega de premios a los campeones y subcampeones que posaron para la foto en una noche inolvidable. En la entrega de premios, se reconoció la enorme campaña que cumplió Primero de Mayo en el Provincial de Clubes, certamen en donde culminó en el segundo lugar.