MIRÁ LOS GOLES DE PATRÓN
Patronato goleó a Melgar en el Grella e hizo historia en la Copa Libertadores
El estadio Presbítero Bartolomé Grella se vistió de gala para ser el escenario de su primer partido en la historia de la Copa Libertadores de América. Paraná y la provincia de Entre Ríos se daban cita con la máxima competencia del fútbol continental. Y la fiesta fue completa, porque Patronato goleó a Melgar por 4 a 1 y consiguió su primera victoria en su inédita participación internacional en el certamen más importante de la Conmebol.
Juan Cruz Esquivel, el punto más alto de la ofensiva entrerriana, abrió la cuenta a los cuatro minutos, y Tomás Martínez, uno de los tantos argentinos del cuadro peruano, empató a los ocho del complemento. Sin embargo, Sergio Ojeda, a los 14; Esquivel, a los 24, y Mateo Levato, a los 41, todos en el segundo período, desnivelaron la historia a favor de los dirigidos por Walter Otta.
Con este resultado, Patronato quedó con tres puntos que le permiten ilusionarse, al menos, con pelear por el tercer puesto para jugar la continuidad de la Copa Sudamericana. Su rival, en tanto, quedó con una sola unidad. Atlético Nacional de Medellín marcha líder con siete y Olimpia de Paraguay (rival de Patrón el próximo 24 de mayo en el Grella) suma cinco.
Patronato tuvo un comienzo soñado, porque a los cuatro minutos ya estaba arriba en el marcador. Cuando Melgar tenía la pelota y todo el local se defendía, Esquivel robó un mal pase de Cuesta en el mediocampo para protagonizar una larga corrida desde el círculo central y tras eliminar al arquero Cáceda, definir con el arco a su merced para adelantar al Santo en el marcador ante los peruanos.
La respuesta del Dominó llegó a través de Tomás Martínez, aunque sin éxito. El conjunto visitante presionó a Arce, la usina de fútbol del equipo dirigido por Otta, y se vio sorprendido por la propuesta del cuadro paranaense. El ex Almagro e Instituto de Córdoba mostró grandes pinceladas de su juego en algunos pasajes en los que Patrón se defendió con la pelota.
Sin embargo, el Negro no logró ampliar la diferencia. Solís pudo haber anotado el segundo gol de la noche, pero el palo derecho del arquero impidió que su disparo desde el borde del área se metiera en la valla defendida por Cáceda. Otra gran ocasión, sobre el final del primer tiempo, fue para el desequilibrante Esquivel, luego de un cambio de frente de Solís que lo encontró en la medialuna del área, pero su disparo salió apenas al costado del ángulo superior izquierdo del arquero.
El complemento tardó en ponerse en marcha por un problema en el VAR y el árbitro convocó a los capitanes, Ojeda y Cuesta, para comunicarles que no podrían ponerlo en funcionamiento. Algo que finalmente ocurrió en el transcurso de la etapa final.
Tras un cabezazo defectuoso de Mateo Levato, el elenco de Arequipa llegó por primera vez en el partido para exigir a Matías Budiño, el arquero elegido por Otta para este encuentro. Fue luego de una combinación entre Bordacahar e Ibérico, que terminó la jugada con un disparo esquinado, cuando el cronómetro marcaba tres minutos. Aquella jugada fue un aviso de lo que vendría, porque después de una pared con Bordacahar, Tomás Martínez tocó, de primera y con sutileza, a la red para el 1 a 1, a los ocho minutos.
Para fortuna del Rojinegro, la respuesta llegó rápido, porque se jugaban 14 minutos cuando Arce envió un tiro libre en forma de centro al segundo palo, Geminiani la bajó y Ojeda, desde atrás, acomodó la pelota con un zurdazo algo incómodo para el 2 a 1. Lo mejor del local vino después, con el recambio y la ambición de ir por más. A los 24 minutos, Cobos apareció por izquierda y mandó un centro pasado, Russo la bajó de cabeza y Esquivel, de volea, dejó sin opción al arquero para el 3 a 1. Golazo, histórico.
Sin embargo, faltaba la frutilla del postre. Cuatro minutos restaban para que se cumpla el tiempo cuando una buena combinación entre el ingresado Kevin González y Geminiani derivó en un centro para Díaz -otro de los que entró desde el banco-, que asistió a Levato dentro del área. El lungo delantero definió con clase al segundo palo con el borde interno del pie derecho, para colocar el 4 a 1. El resto fue pura fiesta, para Patronato que alzó la copa de la victoria cuando más lo necesitaba y merecía su gente. El Grella tuvo un estreno internacional a la altura de las circunstancias: a puro gol.