DOS CASAS DESVALIJADAS EN LOS ÚLTIMOS DÍAS
Ola de robos en el Camino de la Costa: los vecinos reclaman por más seguridad
Luego de que trascendiera la noticia de que dos casas contiguas del Camino de la Costa fueron violentadas en los últimos días, Ahora ElDía se comunicó con el presidente interino de la comisión vecinal del barrio, Celso Salvia, para indagar en el panorama de inseguridad que se vive en la zona en estos momentos.
Según indicó Salvia, ya han ocurrido diversos hechos delictivos a lo largo del año. “En algunos casos los vecinos denuncian, en otros no; yo insisto en que siempre hay que hacer la denuncia”, marcó. Sobre las dos casas desvalijadas entre esta y la semana pasada, comentó que una de ellas pertenece al escribano Enrique Zapata, que si bien reside en la vivienda en ese momento se encontraba ausente, lo cual fue aprovechado por los malvivientes para saquearla. “Hay quienes continuamente están mirando lo que va pasando en las viviendas de la zona y, por lo visto, vieron que en esa casa no había nadie momentáneamente. Alguien forzó el candado del frente, pero el verdadero daño lo hicieron en la parte de atrás de la casa, que da a una parte de campo. Rompieron el alambrado de tejido y una puerta trasera”, precisó, y explicó que las zonas descampadas, y las de pajonales y monte, que forman parte del barrio facilita que los delincuentes tengan vía libre para cometer sus delitos sin ser vistos.
Algo similar sucede con los caminos de tierra sin mantenimiento, que se vuelven intransitables y, por lo tanto, poco monitoreados por los vecinos y la policía. “Hay calles transversales con las que se puede ir hasta el medio del campo, pero si no están arregladas tampoco anda nadie y nadie ve nada”, observó. Además, señaló que también cruzan canoas desde el otro lado del río con personas que “sondean” el barrio en busca de oportunidades para cometer un próximo robo.
Sobre otros ilícitos ocurridos este año, el presidente de la comisión vecinal contó que sufrió el incendio intencional de su casa: “Tengo una casa al fondo, donde termina el camino y me la prendieron fuego. Es la casa en la que yo nací y me crié, y se llevaron a mi historia”. “Hay otros vecinos a los que les han robado bombas sumergibles, pertenencias varias o máquinas de cortar pasto”, lamentó.
Ante esta dramática situación, y a raíz del pedido de ayuda de los vecinos, desde la Jefatura Departamental se comprometieron a reforzar los controles con el patrullaje de la policía montada, dada la dificultad de las calles deterioradas y –en ocasiones- la falta de personal policial. “Nosotros dependemos de la Comisaría Quinta, que nos atienden y escuchan ante cualquier necesidad que tenemos, pero ellos también están con una limitación muy grande de personal”, comentó Salvia.