MODERADAS EXPECTATIVAS EN GUALEGUAYCHÚ
Los prestadores esperan sortear las bajas reservas de Semana Santa con el turismo espontáneo
Según los prestadores, el nivel de reservas ronda entre el 60 y el 70%, un número muy bajo en comparación a años anteriores. Ahora la esperanza está puesta en aquellos que quieran hacerse una escapada de sábado a domingo para tratar de salvar un poco los números. Con un nuevo fin de semana largo flojo, el sector turístico se acostumbra a trabajar sin el 100% de ocupación.
Lejos de los años anteriores, cuando en Semana Santa los hoteleros de la ciudad cubrían con mucha antelación el 100% de su capacidad con reservas anticipadas y para tres o cuatro días, actualmente el sector vive de los turistas que ingresan día a día, por una o dos noches.
Sin ir muy lejos, el año pasado la ocupación promedio fue del 82,5% (según el Consejo Mixto de Turismo), mientras que para este 2025 se aguarda llegar a ese número teniendo en cuenta viernes y sábado, que son los dos días más fuertes.
“Hemos tenido mejores fines de semanas, sin duda. El nivel de reservas y de fue bastante flojo, por ahí el de consultas creció un poquito ahora, pero nada de otro mundo. Esta semana que pasó fue la que es la del Turismo en Uruguay, pero tampoco hemos tenido presencia importante de visitantes del vecino país”, expresó la empresaria hotelera Marisa Yabrán.
En su hotel, ubicado en plena Costanera, hasta el miércoles tenía apenas un 50% de reservas. Con el clima agradable de la mano, el Viernes Santo ese número se elevó al 70%. “Estamos expectantes a ver qué pasa. Si está lindo por ahí algunos se hacen alguna escapada de 2 días”, aseguró, y agregó que “hay turistas entrando a la ciudad, así que esperemos que ese número sea más alto. Son solo algunos los complejos que están trabajando al 100%”.
Para entender el contexto de estas cifras, Yabrán contó como solían ser las reservas en esta época del año: “En años anteriores ya no teníamos más disponibilidad. Históricamente vendemos tres noches para Semana Santa, y ahora las consultas que tuvimos fueron todas para dos noches, así que empezamos a vender por dos noches. Y los colegas están todos en la misma situación, también tienen reservas muy bajas, estamos todos esperando que vengan sin reserva, algo que antes no pasaba porque los terminábamos rechazando porque estábamos todos llenos”.
Sobre los motivos de los malos números, sostuvo que “creo que es la crisis en general, hace poco estuvimos en el norte y nos planteaban lo mismo. Tiene que ver con que el que tiene la plata la tiene guardada, no tiene que ver con los destinos, sino que es algo del sector turístico en general. Después evaluaremos con las ciudades que nos parecemos, con datos reales”.
Además, comentó también que ya vienen de un fin de semana largo muy malo. “Marzo fue desastroso para la hotelería. Fue terrible el fin de semana largo porque tuvimos apenas un 30% de ocupación”, concluyó.
En la misma línea, el prestador hotelero y gastronómico Marcelo Giachello, que trabaja más con turistas de paso y no que se queda en la ciudad, marcó que “aparentaba un fin de semana de turismo y consumo muy bajo, pero han pasado varios colectivos que van a las termas de Chajarí y de Federación, y por ahí nos encontramos con colectivos brasileros”.
En cuanto a las reservas del hotel, comentó que están muy bajas, en un 60%: “Haciendo cálculos apresurados en hospedaje debemos estar abajo un 40%. Son muy pocas reservas, solo eventuales. El año pasado teníamos dos o tres noches, y ahora estamos trabajando noche a noche, vendimos mucho jueves y sábado, pero viernes y domingo no, y años anteriores un mes antes tomábamos muchas reservas, y este no pasó eso”.
De esta manera, se replica en los hoteles una lógica a la que no estaban acostumbrados, que es la de recibir en el momento a turistas ocasionales que lleguen buscando un lugar, y ya casi que no hay restricciones con respecto al mínimo de noches, ya que al haber varias habitaciones vacías los hoteleros deben conformarse con que se hospeden al menos una noche.
A falta de lo que pueda ocurrir este sábado, con turistas que se puedan hacer una escapada por una noche, Gualeguaychú tiene un nuevo fin de semana largo por debajo de las expectativas históricas, y acostumbrándose a no trabajar al 100%.