REDES SOCIALES
Los haters y el poder de las palabras
El Carnaval forma parte de mi vida y desde muy pequeña mi gran sueño fue ser parte de una comparsa y pertenecer a este espectáculo a cielo abierto que es el más grande del país.
Tuve un recorrido hermoso dentro del carnaval hasta llegar a mi presente. Formé parte del equipo de maquillaje en Marí Marí, fui colaboradora y también estuve en el taller de vestuario.
Hoy, a mis 34 años, por primera vez tuve el gran regalo de ser convocada por el director Facundo Lucardi para ocupar un rol de personificación y destaque en “Ítaca”: Soy “Perséfone”, hija de Zeus y Deméter, la diosa que gobierna el inframundo. Es un rol maravilloso mediante el cual puedo poner en movimiento todos mis años de formación artística.
Para mí fue un gran desafío que lo recibí con mucha alegría y, sobre todo, con responsabilidad. Sin embargo, como muchas veces lo he visto en compañeras y colegas cuando les tocó o les toca un lugar destacado en la comparsa, el grado de exposición es mayor y es ahí donde me quiero detener y reflexionar porque me encontré en las redes sociales con los hater y sus comentarios violentos y crueles hacia mi cuerpo. Un cuerpo sano que me permite moverme, bailar y expresarme; un que cuido, respeto y me posibilita vivir en plenitud. Por este motivo, decidí hacer público los mensajes que recibí durante la última semana con el sólo objetivo de concientizar y visibilizar el poder que tienen las palabras y el efecto que pueden generar; palabras crueles disfrazadas de opiniones que nadie pide que pueden herir y afectar la autoestima y la seguridad de cualquiera, entre otras cuestiones tal vez mucho más graves.
Dentro de cada traje que desfila en la pasarela del Corsódromo hay una persona que atraviesa diferentes situaciones y realidades. El Carnaval es sinónimo de diversión, inclusión, alegría y diversidad. Por eso es necesario preguntarnos: ¿Qué sentido tiene este tipo de comentarios? ¿Cuál es el fin? Seamos más amorosos para vivir en armonía. No escribo estos párrafos con ninguna otra intensión más que concientizar y hacer visible esta situación que pasamos una gran cantidad de integrantes de las cuatro comparsas que hoy le dan vida a la edición 2025, en especial muchas mujeres.
Mi invitación es que podamos construir entornos digitales más amables donde podamos desarrollarnos sin tanta violencia y crueldad. Pensemos antes de expresarnos en las redes y tengamos presente que las palabras pueden construir y pueden destruir. Está en cada uno de nosotros cómo las utilizamos.