LOS RESULTADOS DE LA AUTOPSIA
Llegó de pasear al perro y encontró a su hijo y a su exnovia muertos en el cuarto
Agustina Roumec estaba cubierta de sangre y apuñalada, al igual que su novio Sebastián Cipriano. Después se supo que fue un femicidio seguido de un suicidio.
La madre de Sebastián Cipriano salió el martes por la noche de su casa en la localidad platense de Los Hornos a pasear el perro y cuando volvió lo encontró muerto en el dormitorio con marcas de puñaladas y junto a su exnovia Agustina Roumec. Desesperada llamó a la Policía Bonaerense, que se presentó en el lugar de urgencia.
Al comienzo de la investigación, a cargo de la UFI N°2 de la fiscal Betina Lacki, la carátula hablada de averiguación de causales de muerte, aunque el análisis de la evidencia que dejaron las pericias realizadas en la Morgue Policial local, terminaron con las dudas: había sido un femicidio, seguido del suicidio del atacante. El quinto en la provincia de Buenos Aires, en sólo cinco días.
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En su declaración ante la Justicia, la madre del agresor reconoció que su hijo y la joven asesinada habían terminado su relación hacía seis meses, aunque él quería volver con ella, aún cuando la chica le había comentado que había comenzado a estar con otra persona.
Los cuerpos hablan
En base al resultado de la autopsia, según Infobae, el cuerpo de Cipriano fue encontrado con "un corte profundo en cuello del lado izquierdo con compromiso vásculo-nervioso, con posible inicio del corte de izquierda a derecha; además presenta cortes de las venas en la muñeca izquierda, cortes profundos y superficiales en la mano derecha”.
En cambio, el cadáver de Agustina contaba con "múltiples lesiones punzocortantes (8 a 10 aproximadamente) en la espalda a nivel dorso, en región abdominal y hombro derecho, corte profundo en el cuello del lado izquierdo con compromiso vásculo-nervioso, y además posee lesiones cortantes en ambos antebrazos compatibles con lesiones de defensa”.
A partir de estas definiciones, y a falta de otras sospechas, fue que desde la investigación no tuvieron dudas en cambiar la carátula del caso y pasar a definirlo como un femicidio.