Formulan denuncia penal contra el uso de agrotóxicos
Por Marcelo Lorenzo
La denuncia del Grupo de Reflexión Rural (GRR), una entidad que impugna el “modelo sojero”, quedó radicada en el Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional Nº 8, Secretaría Nº15, de la Capital Federal.
El escrito judicial fue presentado el 15 de enero de este año y figuran como denunciantes Jorge Eduardo Rulli y Osvaldo Fornari, presidente y asesor letrado del Grupo de Reflexión Rural, respectivamente.
Allí se sostiene que “la implementación del modelo de agricultura industrial que se viene aplicando en la Argentina de manera sistemática desde los años noventa, ha ocasionado a miles de argentinos gravísimos daños en la salud”.
“Trátese ello de lesiones leves, graves y gravísimas, y hasta muertes cuya causa se sospecha con alto grado de certeza –según los numerosos testimonios de pobladores de diversos lugares de implementación del modelo sojero- que los mismos serían consecuencia del uso masivo de agrotóxicos”, se indica.
Reflexión Rural sostiene que “estaríamos en presencia de conductas criminales que afectan de un modo irreversible derechos humanos elementales”, razón por la cual se le pide al juez que investigue las responsabilidades a nivel empresarial o funcionarial, implicadas en el proceso.
La denuncia califica de “modelo genocida” a la agricultura industrial, que funciona mediante el uso masivo de agrotóxicos, a partir de sus efectos letales sobre las poblaciones expuestas a estas sustancias.
Dado que se “habrían producido lesiones y muertes” por esta causa, los denunciantes aseguran que corresponde “determinar, mediante un proceso legal, los autores, coautores, partícipes, cómplices y/o encubridores” de este modo de producción agrícola.
Además, se le solicita a la justicia que dicte “urgente medida cautelar tendiente a suspender, y/o limitar, la venta y/o comercialización y uso de todos los agrotóxicos” hasta tanto se aclare el asunto.
Rulli y Fornari estuvieron en Gualeguaychú días atrás, en el marco de un recorrido por Entre Ríos, que es una de las provincias, según explicaron, donde hay víctimas por las fumigaciones aéreas agrícolas.
En diálogo con EL DIA, los miembros del Grupo de Reflexión Rural explicaron los alcances de la denuncia penal que presentaron. Explicaron que tras una larga prédica contra las fumigaciones, al fin la cuestión tomó estado público en los medios de gran alcance.
Al respecto, mencionaron el programa La Liga, que se emitió a fines de 2008 en el canal de aire TELEFE, y una nota de tapa reciente aparecida en el diario Página/12, en los cuales se presentó con crudeza el “lado oscuro” del modelo sojero.
También la presidente de la Nación se hizo eco de esta preocupación, al ordenar a la Ministra de Salud, Graciela Ocaña, que forme una comisión que investigue las consecuencias del uso de agrotóxicos.
“Nos alegra que por primera vez haya un reconocimiento del problema, que estaba tan tapado. Pero hay un esfuerzo también de los funcionarios por mantenerlo limitado a la situación de la ciudad de Córdoba y al grupo de las madres del Barrio Ituzaingó, que vienen peleando por este tema desde hace muchos años”, aclaró Rulli.
“Nosotros queremos ir más allá. Respaldamos estas medidas, las aceptamos como positivas. Pretendemos que haya un debate sobre el modelo agrario en la Argentina. También que algunas de sus consecuencias, como la sequía, sean vistas en el contexto del modelo rural elegido hace muchos años”, afirmó.
Según explicó, más allá de la preocupación oficial por los efectos en la salud de los agrotóxicos, el “gobierno argentino nunca se bajó del respaldo irrestricto a este modelo productivo”.
“Creo que está aceptando una realidad, que es la realidad de nuestra protesta. Nosotros antes éramos un puñado de audaces, y ahora somos un vasto movimiento de vecinos de pueblos fumigados en todo el país”, explicó Rulli.
“Lo que vemos, además, es que en muchos casos la justicia está teniendo que responder a este movimiento y muchos medios periodísticos están reflejando el problema. Esto la clase política, entonces, no lo puede obviar”.
Fumigación y política
Ante una pregunta, Rulli admitió que el gobierno argentino, al que antes no le interesaba el problema de las fumigaciones, ahora lo hace porque está enfrentado con el campo, tras la pulseada por la Resolución 125.
“Creo que se intentó aprovechar esta situación de las Madres del Barrio Ituzaingó de Córdoba, para una coyuntura, que es el enfrentamiento con el campo. Y la posibilidad de que se retomaran acciones de protestas por parte de la Mesa de Enlace”, declaró.
“Nosotros cuando vemos que el tema de las fumigaciones es implementado como parte de una puesta política coyuntural contra el campo, simplemente lo que tratamos es de recordar que aquí habría que discutir cosas más profundas”, precisó.
“Más allá de que el gobierno haya conseguido sus pequeños réditos, nosotros también sentimos que hemos logrado que se estableciera un debate nuevo sobre la agricultura industrial”, indicó.
El planteo judicial
Con respecto a la denuncia penal, el doctor Fornari reconoció que su primer escollo estará en la jurisdicción o competencia. Al respecto comentó que si bien los damnificados por los agrotóxicos viven o vivieron en el interior del país, la “matriz o génesis” del modelo está en Capital Federal.
De ahí, dijo, la presentación de la denuncia en un juzgado federal de esa ciudad. Ocurre que es en Capital donde tienen asiento los fabricantes y comerciantes de estas sustancias (como el Glifosato), y es allí además donde operan los organismos nacionales (como el Senasa, el INTA, la Facultad de Agronomía, la Secretaría de Agricultura, entre otros) que avalan el modelo.
Con respecto a la responsabilidad de los funcionarios, en los distintos niveles, Fornari explicó que “se ha adoptado un modelo de producción agraria en el que se utilizan insumos sumamente tóxicos, con escasa o nula capacidad del Estado para controlar su uso o aplicación”.
Por otro lado, Rulli señaló que el Grupo de Reflexión Rural viene verificando hace tiempo en Entre Ríos varios casos de víctimas de las fumigaciones. “Queremos lograr atraer la atención de la ministra Ocaña con varios casos muy dolorosos y muy conmovedores que se dan en la provincia de Entre Ríos, donde el modelo ha golpeado de una manera más fuerte, tal vez porque hay más población en el campo”, explicó.
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