"LAS PERSONAS ERAN OBJETOS SEXUALES"
Esnaola, sobre la causa Gustavo Rivas: las pruebas en su contra, las víctimas que no hablaron y qué falta para la prisión domiciliaria
La abogada querellante en el caso de corrupción y abuso de menores contra Gustavo Rivas, expresó que “todavía Rivas tiene instancias de apelación, pero nosotros confiamos en que pueda cumplir con la prisión domiciliaria por su condena”.
En diálogo con AHORA Radio Cero, Esnaola expresó que “Rivas está condenado por una sola causa. Ahora, la Cámara de Casación en primera instancia y el Superior Tribunal en segunda, votaron en contra de la prescripción de los otros siete casos. Por eso ahora lo que se viene es un nuevo juicio por los siete casos sobre lo que la defensa de Rivas pidió la prescripción de las causas”.
Sobre las instancias de apelación a las que puede acudir el condenado, la abogada sostuvo que “actualmente, Rivas tiene derecho a apelar ante la Corte Suprema, no creo que le den la razón. Su futuro será la prisión domiciliaria, aunque eso será cuando se terminen las instancias de apelación. La primera sentencia fue en junio de 2019, la causa empezó en 2017. Pero hasta tanto no se agoten las instancias de apelación que tiene el condenado, no podrá hacerse efectiva la prisión domiciliaria.
“Son tiempos lentos de la Justicia, pero el sistema judicial también permite este tipo de instancias de apelación. Igualmente, nosotros confiamos en que Rivas va a ir a prisión domiciliaria”, aseveró.
Esnaola expresó también la complejidad de los delitos por los cuales se acusó a Rivas y por qué se pidió que se revoque el pedido de prescripción. “Hay normas internacionales que expresan que en algunos delitos, no existe la prescripción de la causas por no haberlas denunciado en su oportunidad, especialmente aquellos que atacan los derechos humanos”.
“En el caso de Rivas, las personas pasaron de ser personas humanas para convertirse en objetos sexuales. Entonces, al haber acreditado que a Rivas lo único que le interesaba era utilizar a esos chicos como objetos sexuales, es que Casación y el STJ considera que se violaron los derechos humanos”, ejemplificó.
También la abogada sostuvo que “todo lo que se dijo sobre las causas está probado. La mayoría de las víctimas hablaron sobre los instrumentos que Rivas les pedía que utilizaran para su placer. También se probó que Rivas les pagaba a los menores por sexo, por eso se puede probar la promoción a la prostitución”.
“Esos actos perversos, excesivos y demás, hicieron correr peligro que las personas que estuvieron involucradas en los hechos, tomaran esas prácticas como normales o comunes para su vida cotidiana. Es una causa compleja porque son delitos peligrosos y que una parte de la sociedad no los reconoce como tales. Pero hay cosas muy serias detrás de todo esto, hablar de abuso, de violación, de prostitución, son términos y cosas muy serias. El problema es que existe mucha ignorancia sobre este tipo de delitos, y mucha gente habla sin saber sobre temas sumamente delicados”, consideró la letrada.
Sobre la cantidad de personas que denunciaron, Esnaola indicó que “muchas de las víctimas no se reconocieron como tal porque estaban bloqueados mentalmente. No es una cuestión sencilla reconocerse como víctimas de delitos tan aberrantes, que destrozan la autoestima y que colocan a esas personas en una situación de absoluta vulnerabilidad. Por eso fueron pocas las víctimas que llegaron a juicio, hubo muchas víctimas que no hablaron porque nunca se reconocieron como tales”.
“Rivas es una persona perversa, que utilizó su condición de abogado y de persona pública para armar una coraza sobre su figura. Pero que también utilizó dicha condición y cierto halo de poder para amedrentar a las víctimas, expresando que había videos y fotos que se verían postmortem. Todo eso jugó en contra y muchas de las víctimas optaron por el silencio”, concluyó.