LA IGLESIA RUMBO A LA ELECCIÓN DE UN NUEVO PAPA
El mensaje del Obispo Zordán a los fieles en la previa al Cónclave: "Despeguémonos de las intrigas palaciegas"
En el día de ayer, el Obispo de Gualeguaychú, Monseñor Héctor Luis Zordán, compartió una carta dirigida a toda la comunidad católica del sur entrerriano en la que reflexiona sobre la importancia detrás de la próxima elección de un nuevo Pontífice. Se trata de un momento único y sumamente significativo para los fieles de todo el mundo, y ante el cual Zordán pidió especial oración “en espera esperanzada”.
A continuación, la carta completa:
Queridos hermanos de la Iglesia en el sur entrerriano.
Como los discípulos del Señor, “que estaban tristes y lloraban” por su partida en aquellos días de Pascua (Mc 16,10), seguimos atravesados por el dolor, aunque animados por la esperanza pascual, ante el fallecimiento del Santo Padre Francisco. Pero al mismo tiempo nos disponemos a vivir un momento histórico, particularmente fecundo: la elección de un nuevo sucesor de Pedro como obispo de Roma y pastor de la Iglesia universal.
El cónclave (reunión de cardenales para la elección del nuevo Papa) está
convocado para el miércoles 7 de mayo. Y nosotros nos sentimos llamados a intensificar
nuestra oración pidiendo por la Iglesia toda, por quienes deben elegir y por quien sea
designado como pastor universal. Por eso les pido que multipliquemos los momentos de
oración personal y comunitaria, en las familias, en las celebraciones litúrgicas, en las
comunidades educativas, en las instituciones y grupos eclesiales.
La elección del nuevo Papa es un verdadero acontecimiento de sinodalidad en la
Iglesia: exige escucha y discernimiento, encuentro y compromiso, acuerdos y consensos
de quienes tienen la misión de elegir, acompañados por la oración confiada de todos y la disponibilidad de cada uno para acoger con docilidad –en obediencia y colaboración– a quien sea elegido.
Seamos protagonistas en este acontecimiento; no solo espectadores o
comentaristas de algo que sintamos ajeno. Despeguémonos de las intrigas palaciegas que muchas veces rodean estos eventos. Como verdaderos discípulos de Jesús y miembros del “santo Pueblo fiel de Dios” –expresión usada frecuentemente por el Papa Francisco– oremos en espera esperanzada, sabiendo que es Dios quien, a través de medios humanos, conduce a la Iglesia.
Con mi afecto fraterno, les hago llegar un cordial saludo en el Señor resucitado.
Héctor Luis Zordán m.ss.cc.
Obispo
San José de Gualeguaychú, 28 de abril del Año Santo 2025.