INVESTIGACIÓN Y MISTERIO
El iraní arrestado en Concepción del Uruguay se abstuvo de declarar y seguirá detenido
El iraní que fue detenido en la provincia de Entre Ríos, Asad Azan no declaró este lunes, pero volverá a ser interrogado el martes. Por ahora, continuará detenido en una comisaría, mientras el Consulado de Irán ya está al tanto de su detención y procesamiento. La Justicia Federal aún no pudo constatar la identificación del joven y ni siquiera pudieron establecer de manera fehaciente que sea oriundo de Irán.
La defensora oficial que tomó el caso, Julieta Elizalde, dijo que el detenido se negó a declarar por el hecho que se le imputaba, uso de documento ajeno, durante la indagatoria a la que fue sometido a primera hora del lunes por la tarde por el juez federal Pablo Seró.
Elizalde puntualizó que en la causa “hay un traductor designado” para superar la barrera idiomática, ya que el hombre habla un inglés muy básico y no domina el castellano. El inconveniente es que el intérprete interactúa en la audiencia desde Buenos Aires a través de la plataforma Zoom.
La abogada, que tiene a su cargo interinamente la Defensoría Pública Oficial ante los Tribunales Federales de Primera y Segunda Instancia de Concepción, también confirmó que la Justicia Federal “comunicó la situación al Consulado” de la República Islámica de Irán. Asimismo, remarcó: “Desde la Defensoría lo estamos ayudando en su situación personal”.
“Es muy difícil para él comprender un hecho sencillo. Y es más complejo aún comprender un hecho técnico. Mañana (por el martes) vamos a continuar para ver si relata algo más en relación a cualquier otro hecho”, dijo por su parte el juezo Seró, al término de la audiencia.
“Estamos trabajando exhaustivamente para identificarlo, más allá de que él dé su nombre. Nosotros necesariamente debemos probar que se trata de la persona que dice ser”, agregó. Las dudas de la Justicia apuntan también a constatar si su nacionalidad es realmente iraní. “Todo es materia de investigación. Estamos caminando en el aire”, graficó
El ciudadano iraní continuará detenido en la sede de la Comisaría 1ª de la Policía de Entre Ríos, ubicada en calle Díaz Velez y Teniente Ibáñez, de Concepción del Uruguay. La razón es que al no tener identificación procesal aparece en el caso uno de los principales riesgos procesales de toda investigación penal: la falta de arraigo de la persona.
“Esta es una medida cautelar, no es una prisión preventiva. Quedó a disposición de la Justicia en lo que hace a su declaración indagatoria”, que continuaría el martes desde las 13, en un principio, aclaró el magistrado.
Asan Azad, de unos treinta años de edad, fue detenido el viernes sobre las 13 en la terminal de ómnibus de Concepción del Uruguay, cuando intentaba comprar un pasaje de micro hacia la ciudad de Concordia, 100 kilómetros al norte, con el documento de otra persona, un correntino domiciliado en Santo Tomé. Además, se le encontró el registro de conducir de un habitante del partido bonaerense de Tigre, pero ninguna documentación propia.
El hombre quedó detenido a disposición de la Justicia Federal. Y pasó en una celda el fin de semana esperando que se le designe defensor y ser llevado ante el Juez de Primera Instancia.
Durante su traslado desde la Comisaría hasta la sede de los Juzgados Federales, el personal policial a cargo del operativo observó que el hombre permaneció siempre en silencio y con una sonrisa dibujada en el rostro en todo momento.
El joven seguirá detenido en la Comisaría 1° "por una cuestión procesal, dado que al no tener identificación aparece uno de los principales riesgos procesales, que es la falta de arraigo".
Y explicó: "Esto es una medida cautelar, no es siquiera una prisión preventiva. Él está a disposición de la Justicia en ocasión de su declaración indagatoria y hemos hecho un cuarto intermedio por la imposibilidad de comunicarnos".
Los indicios
El juez y los investigadores (una comisión de Gendarmería Nacional que será enviada a Concepción del Uruguay), ya cuentan con algunos elementos para reconstruir el camino que terminó con el iraní en la terminal de Concepción del Uruguay.
Y quizás ese sea el puntapié para desovillar esta extraña situación que vuelve a poner al país al borde de un escándalo internacional, porque nuevamente quedan expuestas las graves falencias para el control de entrada y salida de personas.
En cualquier investigación, la clave pasa por cómo se empieza a armar el expediente. La causa del iraní indocumentado, en Entre Ríos, tiene como primer capítulo la intervención del Comando Radioeléctrico de Concepción del Uruguay, en la terminal de esa ciudad entrerriana, ubicada en Galarza y Scelzi, alrededor de las 13.15 del viernes pasado.
Hasta allí llegaron porque había un hombre con intenciones de adquirir un pasaje, pero le costaba hablar en español. No hay conexión entre Concepción del Uruguay y la República Oriental del Uruguay, por lo que se supone que si este hombre quería llegar hacia ese destino necesitaba comprar pasaje a Colón, que se conecta con Paysandú. O Concordia, que conecta con Salto.
Qué llevaba consigo
Las miradas de los policías y los presentes en el lugar crecían en sorpresa. Al ser palpada esta persona, entre sus prendas los policías lograron dar con una licencia de conducir a nombre de José González, del Talar, provincia de Buenos Aires. También tenía algo de dinero: unos 14.000 pesos. Trasladaba además escritos en hojas y una libreta en un idioma que los investigadores deberán determinar. Además, contaba con un celular Samsung blanco, con servicio de la empresa Claro, que estaba encendido.
Y hay otro detalle que llamó la atención durante las pesquisas: la foto en blanco y negro rota de una nena. Cuando siguieron hurgando se encontró un DNI a nombre un hombre de la ciudad de Santo Tomé en Corrientes. Todo muy contradictorio.
Les dijo a los policías que venía viajando así desde Buenos Aires. Pero nunca les aclaró hacia donde iba.
Semejante situación obligó a los policías a demorarlo y trasladarlo hacía Jefatura Departamental Uruguay, ubicada en San Martín 715. Y todo el material descrito fue incautado para ser analizado. En principio quedó bajo disposición del fiscal auxiliar en turno, Juan Pablo Gile y se dio intervención a personal de Criminalística, Investigaciones y personal de la División Toxicología de la Policía de Entre Ríos.
Es más, este no sería el primer incidente por el que es detenido: hace casi un año habría sido demorado en La Rioja donde habría dicho ser palestino.