El éxodo de médicos argentinos a Chile es un síntoma de la coyuntura actual del país

El problema es de larga data y Mendoza es una de las provincias que más profesionales le aporta a Chile en distintas ramas, aunque cuando se habla de profesionales de la salud se introduce un tema sensible. Las guardias se cobran el doble y en dólares. Si bien el foco está puesto en la especialidad de la pediatría, hay áreas que también presentan complejidad.

"Lo que está pasando es que los niños, niñas y adolescentes de Mendoza no están teniendo acceso a la salud. Esto viene ocurriendo hace tiempo pero era mayormente en la periferia pero ahora ya está afectando al hospital Notti", aseguró Claudia Iturbe, secretaria general de Ampros, sindicato que nuclea a los profesionales de la salud, desde la explanada de este centro asistencial lugar donde se dieron cita médicos y enfermeros en la mañana de este lunes para visibilizar esta problemática.

La principal causa del éxodo de médicos mendocinos/argentinos al vecino país tiene que ver con lo económico. La inflación y la crisis macroeconómica no le permiten a ningún profesional, sea cual sea su trabajo, pensar en ahorrar, en invertir y ni siquiera en llegar a fin de mes.

A su vez, Chile se convirtió con Uruguay y Paraguay, en una de las naciones donde más profesionales argentinos llegan de manera temporal. En el vecino país los llaman "trabajadores golondrina" o "médicos taxi" a todos los mendocinos que van de manera temporal, trabajan y se vuelven. Reconocen que han crecido exponencialmente las guardias durante fines de semana y que ya muchos deciden mudar su vida a Chile, ya que "es más conveniente".

Según manifestaron en distintos medios chilenos, lo primero que "agarran" los médicos mendocinos que emigran son áreas como "embarazo, niñez, anestesiología, medicina familiar, especialidades quirúrgicas, terapia intensiva, oncología, traumatología, patología y endocrinología". "La mayoría de los que emigran son jóvenes: tienen 34 años y trabajo estable en la Argentina, pero deciden emigrar a nuestro país", comentan sorprendidos los chilenos analizando la temática.

"Acá trabajan un poco menos, ganan el doble y cobran por hora lo que parece impensado en Argentina, por eso algunos no descartan incluso asentarse en los países a los que cruzan varias veces por semana para poder aumentar sus ingresos", explican al respecto. Está claro: el cruce cada 15 días hace que ganen unos mil dólares la jornada, algo así como $720.000. Al compararse con los $200.000 mensuales del sector público, la diferencia resulta abismal.