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Detención de Marcelo Corazza: los aberrantes mensajes que comprometen a los acusados
En los meses de investigación, antes de detenerlos, tuvieron intervenidos los teléfonos por la Justicia. Las conversaciones haciendo referencia a menores que los comprometen.
La investigación comenzó en octubre y tras la prueba obtenida el juez firmó los allanamientos y las detenciones contra el ganador de la primera edición de Gran Hermano Marcelo Corazza, Francisco Rolando Angelott, Andrés Fernando Charpenet y Raúl Ignacio Mermet, acusados de corrupción de menores en el expediente a cargo del juez Javier Sánchez Sarmiento.
Hay conversaciones que mantenían Angelotti, Mermet y Charpenet que forman parte del expediente donde se puede ver parte del modus operandi del grupo para captar a los chicos que luego serían abusados, tal como consta en la denuncia.
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"Mañana cumple “16″, viste. En dos añitos más, cuando cumpla 18, le dije: 'Te llevo a Miami. Vamos a Orlando, Disney'", comienza una charla entre Angelotti y Charpenet.
Busca indagar en la situación del otro: "Bueno che, y ¿vos cómo andás con tu mini harem?". "Bien, el otro día se me pudrió el rancho (...) todo bien, que sé yo, como que ya me aburrí de los dos".
Una persona mencionada en la causa como "G", Angelotti se jacta de salir con adolescentes. "Vos me tenés envidia porque te gustaría salir con nenitos de esa edad", escribe, por lo que G cerró: "Tenés 50, hijo de put...".
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"Tengo al chiquitín que fue el que te mostré la foto y después la borré", menciona Charpenet en otra charla con Angelotti.
Este último reclamó: "Que no prestás" y su compañero en el delito completa sobre otro joven: "Esta semana es la fiesta de egresados. Bueno le compré la ropa al nene todo viste".
Mermet en un chat en el que muestra su envidia porque el resto está con menores de edad. "Sos un capo boludo, ¿eso es como comer carne de ternera más o menos, no?", comenta. Charpenet sigue y agrega: "Es como comer caviar".
Estos intercambios forman parte de una serie de intervenciones telefónicas, con 100 horas de escuchas.
Para los investigadores, traían menores de distintos puntos, entre ellos Oberá, en la provincia de Misiones, y los explotaban sexualmente en Buenos Aires.