TIROS, DISTURBIOS Y ROBO EN HOGARES
Denuncian una alarmante ola de inseguridad y violencia armada en un barrio de la ciudad
Residentes de la zona Norte de Gualeguaychú, en las inmediaciones de las calles Federación y Santiago Díaz, aseguran que los robos y disturbios en la zona aumentaron a niveles preocupantes y ahora incluyen la presencia de tiroteos. Ahora ElDía conversó con uno de los vecinos afectados, quien describió la dramática realidad que viven las familias que construyeron su casa mediante el programa Procrear.
En primer lugar, contó que se trata de un barrio nuevo, de 90 lotes, que comenzó a edificarse en el año 2021 y en el cual "los beneficiarios sacamos créditos hipotecarios a 20 o 30 años, con enormes esfuerzos y endeudándonos por demás”.
“Algunos pudimos terminar nuestras casas, sin imaginar la inseguridad del barrio. Es indignante estar pagando créditos a 30 años y que estos problemas no se solucionen”, lamentó. Y ejemplificó: “Se han dado múltiples situaciones de robos en obras en construcción, de donde se han llevado aberturas, materiales y herramientas; así como también de robos en casas habitadas, de las que se han llevado electrodomésticos, herramientas, bicicletas, entre otras cosas, vidrios o puertas destrozadas. Incluso han saltado tapiales e ingresado en domicilios durante la madrugada, mientras vecinos con niños dormían en sus casas”.
Pero el panorama de inseguridad no pareciera terminar con estos hechos puntuales y recurrentes. Este vecino alertó que en el barrio se han producido “situaciones de tiros y corridas, una de las cuales fue este fin de semana”, y que en la zona frente a las casas construidas a través del Procrear ha crecido significativamente un asentamiento en terrenos usurpados. A esto se le suma el desagradable escenario de “las calles intransitables cuando llueve” y los basurales que proliferan sobre la calle Federación: “hay miles de bolsas de residuos; tiran hasta animales muertos”, señaló.
Por último, explicó que si bien “los vecinos han realizado las denuncias correspondientes, pagado serenos, llamado miles de veces a la policía, reclamado al municipio y buscado diferentes alternativas”, la ola de robos y el panorama de inseguridad sigue en aumento. “Varios vecinos incluso pusieron a la venta sus casas o las alquilaron para poder alquilar otra en otro barrio”, concluyó, angustiado por esta dramática realidad.