DEBATE CRUZADO
Contrapunto: La opinión de un concejal oficialismo y uno de la oposición sobre la tecnología 5G
La concejala Vanina Basaldua (Primero Gualeguaychú) y el edil Emiliano Zapata (Más para Entre Ríos) dejaron su postura sobre los beneficios y perjuicios de la tecnología 5G.
Construyendo Conexiones
Por Vanina Basaldúa - Concejal “Primero Gualeguaychú”
En la era de la conectividad rápida y eficiente, las antenas 5G se han convertido en un tema de discusión y debate en muchas comunidades, incluyendo a nuestra ciudad Gualeguaychú. La necesidad de mejorar la señal en áreas periféricas, el impacto positivo en situaciones de emergencia y seguridad, así como la no contaminación ambiental y salud, son aspectos cruciales a considerar.
Me apena decir que la falta de señal en zonas periféricas de Gualeguaychú es un desafío persistente para muchos residentes. Las antenas 5G ofrecen una prometedora solución a este problema, ya que tienen el potencial de mejorar significativamente la conectividad y brindar acceso a servicios esenciales en áreas donde la señal actualmente es deficiente.
En situaciones de emergencia, la velocidad y eficacia de la comunicación son críticas. La conectividad tiene un papel fundamental al proporcionar una respuesta rápida y eficiente durante crisis y eventos inesperados. Desde los de servicios de emergencia hasta la transmisión de información vital a la comunidad, la infraestructura 5G marca la diferencia en la seguridad y bienestar de los ciudadanos.
Uno de los puntos de preocupación comúnmente expresados es la posible contaminación ambiental y los riesgos para la salud asociados con las antenas 5G. Sin embargo, es fundamental basar nuestras opiniones en la evidencia científica. La Organización Mundial de la Salud (OMS), la Comisión Internacional sobre Protección Frente a Radiaciones No Ionizantes (CIPFRNI) y el Ente Nacional de Comunicaciones (ENACOM) han afirmado a través de diversos estudios y repetidamente que no hay evidencia concluyente que respalde riesgos para la salud asociados con las radiaciones no ionizantes de las antenas 5G. Uno de los mitos más presentes en la actualidad es que las antenas 5G generan más radiación que las antenas 4G (las que se encuentran en nuestra ciudad). En realidad, la frecuencia utilizada por las antenas 5G es más alta que las 4G, pero esto no implica automáticamente una mayor radiación. La radiación no ionizante, producida por esta nueva tecnología de comunicación móvil, no tiene la capacidad de dañar el ADN ni causar efectos biológicos perjudiciales, según numerosos estudios respaldados por las organizaciones mundiales mencionadas.
Esta tecnología opera en frecuencias más altas, tienen un rango de cobertura más limitado en comparación con las antenas 4G, esto significa que para proporcionar una cobertura eficiente, se requiere de mayor número de antenas 5G distribuidas en áreas más pequeñas, sin implicar esto un aumento en la radiación nociva. Además, cabe destacar que las antenas 5G operan bajo protocolos avanzados de aplicación y control para garantizar una conectividad eficiente y segura.
Con la instalación de estas antenas en Gualeguaychú, se creará un entorno propicio para el establecimiento y desarrollo de negocios que requieren una infraestructura tecnológica avanzada. La conectividad mejorada no solo beneficia a las grandes empresas que van a instalarse en nuestra ciudad, sino que también fomenta la innovación y el emprendimiento local al proporcionar a las pequeñas y medianas empresas un acceso más rápido y eficiente a recursos en línea y servicios en la nube.
En este contexto, es importante que la comunidad de Gualeguaychú se informe adecuadamente sobre las nuevas tecnologías, desmitificando los temores infundados y centrándose en los beneficios que pueden aportar a la comunidad local, la seguridad y las respuestas en situaciones de emergencia. Al hacerlo, la ciudad podría dar un paso significativo hacia un futuro más conectado, seguro y con nuevas condiciones para las inversiones de los tiempos que corren.
La Conectividad por encima de la salubridad
Por Emiliano Zapata - Concejal de “Más Para Entre Ríos”
Proponer la modificación de una ordenanza, y solicitar su tratamiento en una sesión extraordinaria supone un motivo urgente, que no aconseje esperar que el cuerpo legislativo inicie las sesiones ordinarias en su periodo habitual.
Al leer las modificaciones que se propusieron, resultó imposible no asombrarse más aun al advertir que éstas no se trataron sobre tablas sólo porque el oficialismo no contaba con los votos suficientes para hacerlo.
Esta circunstancia impuso la necesidad de realizar una reunión de la Comisión de Salud que no fue más que una puesta en escena, un mero formalismo para cumplir con el paso obligatorio de tratamiento en Comisiones para luego poder modificar la ordenanza en la sesión extraordinaria.
En esa reunión, los integrantes de los bloques de Más para Entre Ríos y de La Libertad Avanza sugerimos convocar a especialistas que pudieran ampliar nuestros conocimientos en la materia y propusimos que el oficialismo convocara a las empresas interesadas en instalar la nueva tecnología.
La respuesta fue que no había tiempo para eso, que el Intendente tenia urgencia en que se avanzara rápidamente en la modificación de la ordenanza.
Ante ello, desde el bloque que integro adjuntamos al expediente un estudio llevado a cabo por el bioingeniero Esteban Rossi -profesor e investigador de la Facultad de Ciencia y Tecnología de la UNER- que pone de manifiesto la ausencia total de estudios que demuestren la inocuidad de estas radiaciones.
Esta circunstancia pone en evidencia la coacción que este tipo de empresas ejercen sobre los gobiernos locales imponiendo la instalación de estas nuevas tecnológicas por una supuesta necesidad de conectividad por encima de la salubridad ambiental de la población, ignorando con ello, todas las alertas científicas que manifiestan los daños a la salud que causan.
Los integrantes del bloque oficialista sostuvieron que no existe informe o estudio alguno que evidencie los daños. Sostenemos nosotros que, de ser esto cierto, debiera hacerse pie en un principio básico del derecho ambiental que es el principio precautorio según el cual, ante la duda, ante la falta de certeza científica, deben adoptarse todas las medidas necesarias para impedir la degradación del ambiente.
En el año 2020 la Comisión Internacional de Protección de Radiaciones No Ionizantes (ICNIRP), emitió Los Principios del ICNIRP que fueron aprobados por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la Organización Mundial de la Salud (OMS), y establecen que: Se deben cumplir los 3 Principios de Radioprotección:
- Principio de Justificación: si no está justificado, no corresponde que nadie se irradie
- Principio de Optimización: Si es necesario comunicarnos, hacerlo con la menor dosis posible.
- Principio de límites de Dosis: Las dosis deben limitarse para proteger a las personas y en especial a los más sensibles
La realidad es que las modificaciones y derogaciones que sufrieron cada uno de los artículos tratados no hizo más que darle libertad absoluta a las compañías que quieran instalar tecnología 5 G. Facilidades para obtener la habilitación, disponer del lugar que consideren necesario sin importar dónde (plazas, escuelas, centros de salud etc.) ni el tamaño de las antenas.
Llamó mucho la atención la urgencia en modificar la ordenanza, la defensa a ultranza del bloque oficialista que se comportaron como si fuesen abogados de las empresas más que representantes de la sociedad que son, e inclusive la presencia del mismísimo Intendente pidiendo la palabra en la sesión defendiendo la tecnología 5G con argumentos falsos mencionando, por ejemplo, estudios inexistentes de la OMS.