CODEGU y el Cónsul de Uruguay buscan reactivar la Mesa de Integración Binacional

A fines de la semana pasada, la presidente de la Corporación del Desarrollo, Estela Miño, se reunió con el cónsul de la República Oriental del Uruguay, Pablo Gorosito Pereyra, para avanzar en la elaboración de un borrador que contemple la factibilidad de la institucionalización de la Mesa de Integración Binacional, la cual fue promovida por CODEGU hace algunos años. Estuvieron presentes también en la reunión Domingo Veronesi, Sergio Dalcol, Gaspar Girard, Matías Stockli, Tommy Fogg, Eduardo Micheloud, Marcelo Giachello, Juan Schroll y Enzo Bocalandro, todos en representación de diferentes entidades que forman parte de la CODEGU. La visita del cónsul uruguayo despertó gran expectativa en su interior, hecho que se tradujo en una importante participación de representantes de entidades miembros. Durante el encuentro se dialogó sobre la importancia de las relaciones binacionales y la necesidad de formalizar el espacio, invitando a sumarse a otros actores que hoy en día ya se encuentran conectados, como son las municipalidades de Villa Paranacito y Pueblo Belgrano, las comisiones del Carnaval del País y Carrozas Estudiantiles, el Consejo Mixto Gualeguaychú Turismo, la Sociedad Rural, el Centro de Defensa Comercial, la Asociación de Hoteleros y Gastronómicos y Expo Moto, entre otros. “Estos tiempos de pandemia nos han permitido ver a más largo plazo, y es así que resulta menester la institucionalización de la Mesa de Integración Binacional a través de la elaboración de un documento, que permita el trabajo conjunto entre distintos protagonistas públicos y privados de las ciudades de ambas riberas. Aspiramos a darle un mayor vuelo estratégico a mediano y largo plazo incorporando otros sectores como, por ejemplo, el de la Educación”, señaló Miño. En tanto, el cónsul y diversos asistentes recordaron “más allá de que reste este imprescindible paso formal, la Mesa de Integración Binacional ha venido trabajando desde hace un buen tiempo con logros palpables que merecen ser reconocidos. Desde los albores mismos de esta idea existieron representantes argentinos y uruguayos que, creyendo en las enormes ventajas que presupone la integración de los pueblos, han hecho esfuerzos inmensos para el desarrollo de la región”. Por último, Miño aseveró que “el futuro de este espacio es promisorio”, al tiempo que destacó que “debemos aprovechar los meses próximos para elaborar ese primer documento”, finalizó.