COPA DE LA LIGA
Boca le ganó a Platense con dos golazos y el primer grito de Cavani
En la Bombonera, el local se impuso por 3-1 con goles de Zeballos, el uruguayo y Medina (descontó Morgantini). El equipo de Almirón ya piensa en Racing por la Libertadores.
Dos partidos se demoró la primera ovación para Edinson Cavani, ese delantero de relieve mundial que vino a desplegar su fútbol en Argentina. Y se ganó el mimo el uruguayo no solo por su gol de cabeza, sino por lo que jugó y hasta por lo que peleó: discutió con fuerza con Gastón Suso y se puso cara a cara con el siempre polémico árbitro Fernando Espinoza. Así, con un muy buen Cavani y con un Exequiel Zeballos determinante, Boca le ganó 3-1 a Platense para llegar enfocado al duelo contra Racing.
No tuvo demasiada importancia lo que pasó en la cancha. Jugaron Boca y Platense por la primera fecha de la Copa de la Liga, pero todos en la Bombonera -menos los visitantes, claro- pensaban en el duelo del miércoles contra Racing. “Quiero la Libertadores”, se gritó con fuerza desde todos los sectores. Siguió “Racing botón” y al rato “en la Copa cueste lo que cueste”. Sucede que el objetivo de Boca es esa copa que le es esquiva desde 2007 y nada tendrá demasiado valor mientras la esperanza de obtener el trofeo internacional esté latente.
No jugó para cumplir Boca, pero casi. Es cierto que Jorge Almirón usó el duelo ante el Calamar para probar su esquema predilecto (4-3-3) y para darle minutos a algunos futbolistas. Pero nadie se exigió ni un poquito de más porque lo de miércoles aparecía demasiado grande en el horizonte.
Son cruciales los minutos para Marcos Rojo, el capitán y referente que todavía está lejos de su nivel físico: le cuesta cuando la pelota va a su espalda y es lógico. Pero tiene oficio el zaguero y puede suplir su falta de velocidad con inteligencia y sabiduría. Los otros que sumaron millas y que pueden ser utilizados desde el inicio el miércoles fueron Jorman Campuzano y Edinson Cavani. La sensación es que el colombiano aún no está para ser el volante central titular. Al uruguayo, en cambio, la jerarquía se le distingue hasta al correr. “Toca absolutamente todas las pelotas de primera”, se sorprendió un plateísta al término de la primera parte. Se presume que hará dupla con Merentiel ante la Academia.
Después estuvieron los que corren desde atrás y que pelean por meterse en el equipo titular. Se piensa en Ezequiel Fernández y Exequiel Zeballos. Y fue el juvenil extremo el que más provecho le sacó al juego: fue determinante por su sector, además de que marcó un golazo picándola ante la salida del arquero Ramiro Macagno.
Los otros refuerzos alternaron buenas y malas. Por izquierda, en la primera etapa, tanto Lucas Janson como Marcelo Saracchi perdieron más de lo que ganaron.
Y como Cristian Medina no puede faltar en ningún equipo de Boca, este viernes jugó y demostró por qué es el de mejor presente: habilitó de gran modo a Zeballos en el gol. Es cierto que la jugada del elenco de Almirón fue hermosa: comenzó en los pies de Javier García y culminó con la definición estelar del Changuito.
Pero no brilló Boca ni mucho menos. Al equipo le sigue costando dominar los partidos plantado en campo rival: maneja mucho la pelota, pero más cerca de su arco que del rival. Por eso no regala nunca la sensación de arrollar. Tuvo algunas Platense, la más clara un disparo dentro del área de Luciano Ferreyra que se fue muy cerca.
Rápido en el complemento llegó el grito de Cavani tras otra gran jugada colectiva que se inició en García y que tuvo un gran centro de Zeballos para el cabezazo del goleador. "Uruguayo/uruguayo", sonó.
Descontó Platense porque siempre estuvo cerca en el juego. Se dijo: Boca no lo arrolló. Nicolás Morgantini se encontró con un rebote en el área y la clavó abajo de zurda.
Aguantó el local en los minutos finales y no sufrió, más allá de un disparo de zurda de Mateo Pellegrini. Y a la fresca noche de la Bombonera le quedaba solo un golazo al ángulo de Cristian Medina, ese que no puede faltar en ningún equipo de Boca.