MANO A MANO CON LA DEPORTISTA OLÍMPICA
Ana Gallay brindó una clínica especializada de beach vóley en Gualeguaychú
La atleta tres veces olímpicas brindó una charla teórica en el salón de la Caja de Jubilaciones de la Municipalidad de Gualeguaychú en horas de la mañana. A la tarde trabajó en las instalaciones de la Caja de Jubilaciones sobre Boulevard Martínez en una clínica especializada de Vóley de Arena. La organización estuvo a cargo de la Dirección Municipal de Deportes.
Entrevistada por ElDía, la experimentada jugadora de Nogoyá Ana Gallay, quien en 2015 fuera campeona Panamericana en Toronto y participara de tres juegos olímpicos, contó cómo fueron sus inicios en el vóley y particularmente en el beach. “ Comencé en el convencional, terminé la secundaria y me fui a estudiar Educación Física a Gualeguay en donde me recibí de Profesora. Ahí, es como que dejé la disciplina, hice un curso para ser juez de Beach Vóley. Me fui a arbitrar, me fui metiendo en el deporte en sí, me gustó muchísimo y acá estamos. De esa manera comenzó mi carrera en el Beach, un deporte muy amateur, en el cual transcurrí varios años jugándolo de esa manera. Se jugaba solo en el verano y cuando se dio la cancha de clasificar a juego olímpico en un circuito sudamericano nos pusimos a entrenar fuerte con Virginia Zonta, logramos el pasaje con el apoyo del ENARD”.
Recordó que en el vóley convencional jugó en Aldea Brasilera en distintas posiciones. “Lo hice en, las categorías más bajas de Central, luego de Punta, para terminar como Armadora, algo que me vino muy bien, porque en el Beach Vóley hay que hacer de todo. Tenés que armar, pegar, fui bloqueadora, ahora soy bloqueadora, defensora y en el sudamericano con Fernanda Pereyra, vamos una y una, en lo que es una diferencia con la compañera. Una es la bloqueadora y otra la defensora, aunque las dos tienen que saber cumplir con ambos roles”, y detalló que desde que juega con Fernanda es “más defensora que bloquedora”.
La deportista dijo que está “muy adaptada a jugar en la arena y que si le tocara jugar en el vóley convencional. No es lo mismo entrenar en la arena que en una cancha. No podría saltar en el piso, mientras que en la arena caemos en cualquier posición y no sucede nada. El beach vóley tiene una exigencia física por el terreno de juego”.
Además, remarcó que el gimnasio “es una ayuda muy importante para estar bien, más allá de que la arena te fortifica las piernas, mientras que en el gimnasio se trabaja con potencia, tanto en miembros superiores como inferiores”, pero a su vez resaltó que “es fundamental estar muy fuerte de la cabeza más allá de la preparación física y muchas veces se gana más con una cabeza que con el físico”.
En la clínica, ante un auditorio conformado por gente relacionada al vóley como jugadores, entrenadores, árbitros, profesores de educación física, Gallay contó sus inicios en la disciplina, como ingresó en el Beach y su experiencia, a título personal, como jugadora en tres citas olímpicas, los panamericanos, sudamericanos y demás torneos. También de cómo es el trabajo “día a día en esta disciplina, transmitir mi experiencia en definitiva y dejar el mensaje de que con esfuerzo toda se logra y en esta zona que tiene muchas playas es sencillo montar una cancha y también encarar escuelas de vóley de playa para conocer el deporte desde un principio”, cerró.
El Beach en Argentina
Gallay opinó que este deporte en nuestro país “está en desarrollo y espero que el mismo alguna vez sea profesional”. Contó que “este fin de semana se está desarrollando una fecha en Rosario en forma amateur que en nuestro caso no estamos jugando”, y acotó que “la única manera que cambie esta realidad es de que se profesionalice y de esa manera se vayan sumando más jugadoras y que todo no sea a pulmón como lo es en el presente”.
Planteó, con autoridad, que “Brasil, Canadá, Alemania, son potencia en una disciplina que en su país es profesional, teniendo Europa muy buenos circuitos”.
Señaló que es un deporte “muy atractivo que en los juegos olímpicos convoca a mucha gente y que en los mismos se agotan rápidamente las entradas; es algo muy loco, porque en otras disciplinas muchas veces no se completan las localidades que salen a la venta”.
En el caso de Argentina, opinó que “es un deporte que debería practicarse mucho más en la costa, en la zona de playas”.
Su enorme trayectoria
Junto a Georgina Klug ganaron el Panamericano de Toronto (Canadá) y con Fernanda “obtuvimos una medalla de plata en Lima”. Suma tres Olimpicos. Londres (2012) Río de Janeiro (2016) y el Tokio (2021). Dijo que “nos podría haber ido mejor en Río, pero no tuvimos nuestro mejor desempeño, después de un proceso muy bueno, inclusive diez días antes habíamos jugado un Gran Slam con Georgina en la que terminamos cuartas contra rivales que también participaron de los olímpicos”.