FUE CONDENADO A PRISIÓN PERPETUA
A casi diez años de haber quemado y matado a su pareja, un entrerriano fue declarado culpable de femicidio
La jueza técnica Matilde Federik, vocal del Tribunal de Juicio y Apelaciones de Paraná, impuso hoy la pena de prisión perpetua más las accesorias legales a Celso Britte, quien fuera declarado culpable por un jurado popular del delito de "Homicidio agravado por el vínculo, por ensañamiento y por haberse perpetrado en un contexto de violencia de género".
Fue en el marco del legajo "Britte, Celso Bautista s/Homicidio triplemente calificado por el vínculo, por ensañamiento y por haber sido perpetrado mediando violencia de género". El debate había comenzado el viernes de la semana pasada en el Salón de Actos del Superior Tribunal de Justicia (STJ), en los Tribunales de Paraná.
Tras conocerse el veredicto y una vez que el jurado fue liberado de su carga pública, la jueza Federik dispuso que en la misma sala se efectuara la audiencia de cesura, durante la cual las partes -el fiscal Ignacio Aramberry y el abogado defensor Javier Aiani- expusieron sus argumentos sobre la condena que debía recibir Britte.
Luego la jueza hizo un adelanto de sentencia y dispuso la prisión preventiva del imputado en la Unidad Penal Número 1 de Paraná hasta tanto la sentencia adquiera firmeza. Britte había llegado al juicio en libertad, por lo que quedó detenido en el acto.
La lectura de la sentencia y sus argumentos se realizará el próximo 11 de junio, a las 12.
Se trató del octogésimo noveno juicio por jurados que se realizó en Entre Ríos desde la entrada en vigencia de este sistema de juzgamiento penal.
El hecho
El Ministerio Público Fiscal imputó a Britte que el 12 de marzo de 2015 le aplicó golpes en los muslos, en la región lumbar lateral, en la región torácica posterior derecha y en los pabellones auriculares a Graciela Itatí Retamar, a quien luego le prendió fuego en la vivienda donde convivían, ubicada en las calles Pronunciamiento y Número 921, de la ciudad de Paraná.
Trasladada con el 60 por ciento de su cuerpo quemado al Sanatorio Güemes, de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Retamar falleció seis días después.