8M: Grupos de mujeres se movilizaron bajo la consigna "Paramos porque no se aguanta más”

En todas partes del país, las mujeres marcharon reclamando por sus derechos y una sociedad justa, igualitaria y libre de violencias. Gualeguaychú no fue la excepción, desde antes de las 18 horas, horario previsto para la concentración en la Plaza San Martín, cientos de mujeres se nuclearon para escribir y pintar carteles con los que dejaron en evidencia que los reclamos iniciados hace tanto años todavía no están resueltos. 

Como en todas las marchas feministas, no faltaron los brillos verdes y violetas, colores simbólicos utilizados por el colectivo para reclamar por el derecho a la Interrupción Voluntaria del Embarazo, en el caso del primero y por cese de la violencia de género en el caso del segundo. 

La convocatoria reunió a integrantes de los colectivos “Enredada Feminista” y “Somos Libertas”, a funcionarias políticas de la gestión anterior como Susana Villamonte , Sofía Ghiglione, Andrea Noguera, Selva Chesini , Mariana Farfán, Anastasia Aramburu y Belén Biré. Del actual gobierno municipal estuvieron presentes algunos concejales de la oposición: María Siri Ghisi, Jorge Maradey y Emiliano Zapata. 

También formaron parte de la jornada de reclamo gremios como Agmer y ATE, el grupo Madres de Plaza de Mayo,  así como mujeres y disidencias autoconvocadas.

Además, como ocurre hace años, muchas de las participantes concurrieron con sus hijas e hijos.

Pasadas las 18.30 horas comenzó la movilización rodeando la plaza San Martín para pasar por las instituciones a las cuales históricamente las mujeres han reclamado: la justicia, la policía y la iglesia. 

Luego el frente se desplazó por calle Urquiza en dirección a la plaza  frente al municipio en un gesto claro hacia el actual gobierno municipal.  En este sentido, además de los reclamos por que se garanticen los derechos en salud, también hubo una marcada denuncia a los recientes despidos de trabajadoras contratadas del Municipio con carteles que rezaban: "No despiden ñoquis, despiden trabajadores".

Por otra parte, durante el desplazamiento se evocaron diferentes cánticos y pancartas que fueron desde la demanda por el cumplimiento de la ESI y de la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo hasta el derecho de vivir. 

Pasadas las 19 horas las movilización ingresó por Plaza Urquiza y las mujeres se colocaron en un semicírculo en el centro de la plaza donde diferentes referentes de organizaciones sociales y gremios leyeron el documento que fue confeccionado  luego de cinco asambleas abiertas.

Como todas las jornadas de movilización, tuvo un importante tinte político, y se apuntó fuertemente contra el presidente Javier Milei, el gobernador Rogelio Frigerio y el intendente Mauricio Davico. 

“Todavía la brecha de género es imperante en todos los sectores de trabajo, donde el presidente niega las desigualdades, las violencias, cierra los espacios gubernamentales y nos provoca con sus discursos negacionistas y de odio, niega siglos de reivindicación porque sabe que nuestra lucha es también por la redistribución de riquezas”, apuntaron en esta dirección.

Entre las aristas mencionadas, estuvieron presentes el rol de las mujeres en los comedores comunitarios y las economías domésticas. En esta línea se pidió para que se declare la emergencia alimentaria.

Otro tema abordado durante el acto formal fue la reinvidicación de la memoria y con ella las acciones llevadas a cabo por madres y abuelas de Plaza de Mayo. 

También se reclamó el respeto por la ley de cupo laboral trans que rige en Gualeguaychú, el cual según denunciaron en la actualidad no se cumple. 

El documento fue leído por mujeres pertenecientes a diferentes sectores de la ciudad, evidenciando el reclamo transversal en todas las áreas, no faltó la alusión a la situación de las personas jubiladas así como los intentos a través del DNU de derogar leyes ambientales fundamentales que afectan a la sociedad. En este sentido, se resaltó la lucha de la maestra rural Estela Lemes en contra de las fumigaciones en escuelas rurales. 

Además, como todos los lemas bajo la consiga “Paren de matarnos” se exigió una Reforma Judicial Transfeminista.

Por último, se enfatizó que libertad es sinónimo de acceso a la salud pública, a la educación, al trabajo y a la alimentación.